Los líderes de UGT, Cándido Méndez, y CCOO, Ignacio Fernández Toxo, fueron ayer recibidos por Don Juan Carlos en su primera audiencia conjunta en el Palacio de la Zarzuela, donde explicaron al Monarca el contenido del acuerdo salarial para tres años alcanzado con CEOE-Cepyme para “dinamizar la economía, mejorar la competitividad y el empleo”.
Fuentes de la Casa del Rey explicaron tras la audiencia que este encuentro se enmarca “en la serie de contactos habituales que Don Juan Carlos mantiene, con especial incidencia en los últimos meses, con representantes del mundo económico, empresarial y laboral, dadas las graves consecuencias de la crisis económica” en España, “especialmente en términos de destrucción de empleo”.
En el mismo marco de los encuentros que mantiene estos días “con diversos representantes del mundo económico, financiero, empresarial y laboral”, Don Juan Carlos había recibido este jueves a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, con quien abordó las iniciativas para favorecer el crecimiento y el empleo en una semana “llena de importantes noticias” sobre la superación de la crisis.
En la conferencia de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, Fernández de la Vega quiso dejar claro que las reuniones del Rey no son “una ronda de contactos” y se inscriben en “la normalidad democrática de su función constitucional”, para tener información sobre los asuntos que afectan al Estado.
Por tanto, atribuyó a “opiniones interesadas, que no se corresponden con la realidad”, interpretar que los contactos de Don Juan Carlos para analizar la situación económica son consecuencia de la imposibilidad del Ejecutivo de llegar a un pacto de Estado y quiso dejar claro que la responsabilidad “de abordar acuerdos” es “exclusivamente del Gobierno” y “la está llevando a cabo”.
Sobre el llamamiento del Rey a buscar “grandes acuerdos” que permitan recuperar un crecimiento económico “fuerte y duradero” y “superar juntos, cuanto antes y con la debida determinación, las graves consecuencias de la crisis”, Fernández de la Vega afirmó que “está muy bien, porque va en la línea de lo que el Gobierno está propiciando”.
El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, indicó en declaraciones a la Cadena SER que la patronal está de acuerdo con la idea del Rey de que todos deben “subirse al carro” frente a la crisis y puntualizó que Don Juan Carlos todavía no le ha llamado.
También la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, precisó que esta formación no está aguardando ninguna llamada para acudir a la Zarzuela y recalcó que sólo sería posible un pacto ante la crisis si se le dota de contenido y supone un cambio radical en la política del Gobierno, porque, si no, sería “engañar y defraudar a los españoles”.
Fuentes de este partido han añadido que el Rey está “muy preocupado” por la situación económica y Don Juan Carlos tiene una “función constitucional moderadora”, que, en un momento de crisis, puede traducirse “en un incentivo” para conseguir un acuerdo, pero “sería una irresponsabilidad” que el PP “no dijera en qué dirección” deben ir las políticas económicas.
En nombre de IU, su diputado, Gaspar Llamazares, ha reconocido al jefe del Estado su “capacidad moderadora” en el ámbito social y político, por lo que esta fuerza política acudirá a la Zarzuela si el Rey la convoca para analizar la crisis, pero ha recalcado que la gestión de un pacto de Estado en materia económica corresponde al Gobierno.
Por el contrario, el vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, considera “absolutamente imprescindible” la intervención del Rey con su llamamiento a “amplios acuerdos” para superar juntos la crisis y ha pedido madurez al PSOE y al PP para alcanzar un pacto en este sentido.