En medio del peor año de su laureada carrera, Cristiano Ronaldo llega al Mundial de Qatar 2022 con la mirada puesta en la redención con Portugal de una temporada marcada por la polémica y el mediático divorcio con el Manchester United.
Ahora con las "quinas", donde mantiene la relevancia de siempre, Cristiano intentará ganar el único gran trofeo que le falta y a la vez intentar hacer olvidar el mal momento que atraviesa.
Una entrevista controvertida, abandonar el campo antes del final del partido, alejarse del equipo y ausentarse en la pretemporada fueron algunas de las polémicas que marcaron la segunda mitad de 2022 del portugués en Old Trafford.
En plena separación, Cristiano ya no tiene en el United el protagonismo de antaño y el entrenador del club inglés, el neerlandés Erik Ten Hag, prefiere maximizar su aportación poniéndolo durante las segundas partes de los partidos, para claro disgusto del jugador.
No es el caso en Portugal, donde sigue siendo el líder del equipo dirigido por Fernando Santos, además del capitán y la figura clave en la delantera.
Sin embargo, los aficionados portugueses temen que la situación en Manchester pueda afectar a su jugador estrella y están preocupados por el posible estado de forma de Cristiano, que se perdió el amistoso del jueves ante Nigeria por una gastritis.
También está fresca en la memoria la actuación de Cristiano en los dos partidos de la Liga de las Naciones contra República Checa y España, donde fue una sombra de sí mismo y acusó la falta de ritmo.
Las dudas se agravan con la ausencia confirmada de su habitual compañero en el ataque, Diogo Jota (Liverpool), que ha sufrido una lesión que le dejará fuera de la competición.
En Portugal se espera que esto no vuelva a ocurrir cuando comience el Mundial, que está considerado en el país como el último de CR7.
¿CRISTIANO ANTE SU ÚLTIMO MUNDIAL?
Cristiano Ronaldo está a punto de disputar el quinto Mundial de su carrera, que podría ser el último, aunque el propio crack portugués no comparte la idea e incluso se muestra enfadado con el tema.
"Muchos hacen esta pregunta. Quien va a decidir mi futuro soy yo. Si me apetece jugar más, juego. Quien manda soy yo, punto final", respondió en rueda de prensa a finales de marzo.
Aunque todavía no ha aclarado si este será su último viaje a un Mundial, ya ha garantizado que tiene intención de estar presente en la Eurocopa de 2024 y prometió "un poco más de Cris".
La Copa del Mundo es el único gran trofeo que falta en su palmarés y lo mejor que consiguió fue llegar a las semifinales la primera vez que participó en el evento, en 2006.
En Alemania 2006 ya se perfilaba como la estrella de Portugal, a pesar de la presencia de varios miembros de la generación dorada portuguesa, como la ex leyenda del Real Madrid Luís Figo y el ex del FC Barcelona Deco.
Consiguió marcar un gol contra Irán en la fase de grupos, pero no evitó que las "quinas" cayeran contra Francia en las semifinales.
Volvió cuatro años después para Sudáfrica 2010 ya como capitán. Marcó una vez más, en la goleada por 7-0 a Corea del Norte, pero Portugal quedó eliminada en octavos de final contra la futura ganadora, España.
La historia recordará su frustración durante el partido contra "La Roja" hacia el seleccionador de Portugal, Carlos Queiroz, en el que las cámaras de televisión captaron su arrebato de "así no ganamos, Carlos" tras una sustitución durante el partido.
En 2014, en Brasil, vivió su peor Mundial, y el equipo que capitaneaba no pasó de la fase de grupos. Solo marcó un gol, en la única victoria portuguesa, contra Ghana (2-1), un rival con el que volverá a encontrarse en Catar.
Al peor le siguió el mejor a nivel personal, con 4 goles en 4 partidos en Rusia 2018.
Sin embargo, tres de esos goles se produjeron en el mismo encuentro, en el frenético choque de la fase de grupos contra España que acabó 3-3.
Portugal, entonces campeona de Europa, cayó en octavos de final, esta vez ante Uruguay, otra de las selecciones con las que se volverá a encontrar este noviembre.
El nuevo capítulo del problemático año de Cristiano Ronaldo empieza ya el 24 de noviembre, con el enfrentamiento entre Portugal y Ghana en el Grupo H del Mundial.