UGT y CCOO se han concentrado este lunes contra la siniestralidad laboral en Málaga y han mostrado su preocupación por "la alarmante tasa", insistiendo en la prevención.
Así, han lamentado el fallecimiento de dos trabajadores de 58 y 59 años, respectivamente, que perdieron la vida el jueves en la localidad de Alozaina y en Málaga capital.
El secretario de Salud Laboral UGT Málaga, Vicente Sandoval, ha trasladado "su pesar a familiares, amigos y compañeros, en estos momentos de dolor y tan próximos a fechas donde la celebración familiar está tan presente".
Sandoval ha lamentado que "nuevamente el contador de la vergüenza que registra los trabajadores fallecidos como consecuencia del trabajo, ha visto modificados sus datos". "A fecha de hoy se registran en Andalucía 130 muertes de trabajadores, de los cuales 28 muertes por accidente de trabajo corresponden a la provincia de Málaga, lo que supone que el 21 % de los accidentes de trabajo con resultado de muerte se producen en Málaga", ha explicado.
Con esta cifra, ha continuado, "ya se supera ampliamente el número de trabajadores muertos en el tajo durante todo el año 2021 en el que se registraron 23 trabajadores muertos durante ese año. Confiamos en que durante los 15 días que quedan para finalizar el año 2022 no se produzcan más muertes con ocasión del trabajo. El año 2022 ha sido un año horrible en materia de siniestralidad en la provincia y por ello es urgente la adopción de medidas", ha agregado.
Entre otras medidas que UGT Málaga exige a las Autoridades Laborales, ha destacado el apoyo a "nuestra propuesta de actualización de la ley 31/1995 de prevención de riesgos laborales, que data de 1996, actualizando su contenido e incluyendo la figura del delegado de prevención sectorial, para que el mismo pueda intervenir en aquellas empresas del sector que carecen de delegados de prevención porque la ley no lo exige".
Asimismo, han reclamado "mayor eficacia de la fiscalía especial en prevención de riesgos laborales, informando periódicamente de las acciones llevadas a cabo y el resultado de las mismas en aquellos casos de muerte de un trabajador y que de la investigación del accidente se acredite la ausencia de medidas de seguridad y salud; y mayor dotación de recursos humanos a la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social para incrementar su capacidad inspectora".
Por otro lado, también ha incidido en "dotar de crédito horario suficiente a delegados y delegadas de prevención para el ejercicio de sus funciones con dedicación suficiente".
Por su parte, Juan Rueda, secretario general del Sindicato del Hábitat de CCOO de Málaga, ha aludido a las inspecciones de trabajo y que "controlen a las empresas malagueñas y las que trabajan en Málaga".
Es más, ha agregado que "nosotros queremos también meter directamente como responsable no solo a las empresas constructoras, sino a las promotoras que también tienen mucha responsabilidad en el tema" aludiendo a los plazos de ejecución. "Siempre estamos igual con la construcción, en un solar donde no hay nada de repente hay que hacer la edificación; si son 24 meses lo hacemos en 20, si no tenemos penalizaciones". "En Málaga las empresas con este índice que tenemos de mortalidad y accidentalidad grave está muy claro y obvio que no se mira por la prevención", ha concluido.
