El tiempo en: Huelva

Cádiz

Las Navidades en el comedor social María Arteaga: “Hay familias en lista de espera”

La crisis por el Covid y la inflación aumentan el número de usuarios, que roza el centenar, y los hogares con niños que subsisten gracias a este recurso social

Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Andaluc�a Informaci�n

El ritmo en las cocinas es frenético.

  • El comedor gaditano recupera sus tradicionales almuerzos de Nochebuena y Nochevieja tras la pandemia

 

En los fogones del comedor Virgen Poderosa de Cádiz, conocido popularmente como María Arteaga, en el barrio de La Viña, el ritmo es frenético a diario pero todavía más estos últimos días con los menús especiales de Navidad, en los que no falta el tradicional pavo y entrantes como marisco, jamón, queso y lomo, “como en cualquier casa normal”, explica Sor Manuela, de la Congregación Hijas de la Caridad que gestiona este recurso social, en plena faena en la cocina, donde ponen una dosis de corazón y de cariño extras para compensar muchas ausencias personales y materiales, dado que algunos de los usuarios que almorzaron en Nochebuena ni siquiera tienen en muchos casos un techo donde dormir. Otros tienen una pensión no contributiva de 400 euros que no les da para comer cada día.

Entre ellos, “se corre la voz estos días”, de este menú especial, de ahí que esperasen “no menos de 120 personas”, una demanda que les obliga a ponerse con los preparativos varios días antes. Este año, además, las connotaciones son todavía mayores, teniendo en cuenta que es la primera Navidad desde la pandemia que lo celebran en las dependencias. Desde que estalló la crisis sanitaria han seguido funcionando, pero repartiendo la comida en táper para llevar.

La ansiada normalidad llegaba en septiembre con la reapertura, y con ella los hitos más señalados como este almuerzo, que en el caso de este comedor lo adelantan a la víspera del 24 para disponer de más personal para atender “mejor” a los usuarios. En Cádiz son muy solidarios, y por eso además de los pavos donados tradicionalmente por Pecino, un antiguo trabajador de la Plaza de Abastos cuyos hijos han continuado con la tradición, para estas fechas también reciben provisiones de parte de los colegios, de particulares y del banco de alimentos. En Nochevieja también habrá otra comida especial y en Reyes nadie saldrá del comedor sin su regalo y su trozo de roscón.

Aunque la crisis también se nota aquí; las aportaciones y las colaboraciones se han resentido. “La cosa está mal para todo el mundo, han bajado donaciones, comprendemos que esto es así, pero también se ha incrementado el número de usuarios”, señala. Un balance que alcanzó picos de 130 personas durante el Covid y en el que había solicitantes que “nunca habían hecho uso del comedor”, explica Lucía Reinado, trabajadora social del comedor. 

Antes de la pandemia servían unas 80 comidas diarias (menos los domingos que no abren pero dan bocadillos), ahora  rozan el centenar y cuentan con una veintena de voluntarios.  “Había familias que habían dejado de venir, y ahora han vuelto a necesitar de ayuda", explica. A esta cifra hay que sumar la de las familias con menores a las que también dan cobertura para todo el mes con un lote de alimentos en crudo con productos frescos, chacinas y congelados para garantizar la alimentación de los niños, y al que se une otro especial para la Navidad estos días que incorpora puchero, más chacina y polvorones. La idea es que puedan cocinar en casa y darle la máxima “normalidad” posible dentro de que no sean las mejores Navidades.

En total son 30 las familias a las que ayudan con estos lotes de alimentos mensuales, en coordinación con la Delegación de Asuntos Sociales, pero en estos momentos tienen lista de espera. “Hay un aumento en la demanda. Los precios han subido mucho y las familias tienen que decidir qué pagan: facturas y recibos de suministros, la cesta de la compra que ha subido muchísimo, la luz...no dan abasto”, precisa esta empleada. Con la Asociación Calor en la Noche, que se encarga de los desayunos para las personas sin hogar, el comedor María Arteaga con los almuerzos y el Virgen de Valvanuz con las cenas, se garantiza la cobertura de al menos tres comidas diarias. Nunca es suficiente. La solidaridad debe funcionar los 365 días al año.

Se puede contactar con este comedor social para colaborar en los números de teléfono 956220969 y 618228741 o directamente en la calle María Arteaga. 

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN