El Gobierno ha batido sus marcas habituales y ha tardado menos de una hora en enviar al Congreso su conformidad para el debate de la proposición de ley del PSOE para reformar la Ley de Libertad Sexual, conocida como la del 'sólo sí es sí'.
Conforme a la Constitución, el Ejecutivo tiene capacidad de veto ante toda iniciativa legislativa que considere que afecte a su política presupuestaria, ya sea por implicar un exceso de gasto o por suponer merma de ingresos. Para ello, Moncloa dispone de un plazo de 30 días para comunicar al Congreso que da su conformidad al debate, un trámite imprescindible para que la iniciativa pueda ser discutida en el Pleno del Congreso.
En el caso de la reciente reforma penal para acabar con el delito de sedición, al Gobierno de coalición le sobraron 29 días porque al día siguiente de que aquella iniciativa de PSOE y Unidas Podemos fuera calificada por la Mesa del Congreso ya se comunicó a la Cámara el visto bueno de Moncloa.
Pero esta vez el examen de la iniciativa del PSOE ha debido de durar apenas unos minutos: a las diez de la mañana comenzó la reunión de la Mesa del Congreso en la que se calificó la reforma socialista y se remitió al Gobierno, y apenas una hora después, a las 11.15 horas, ya llegó a la Cámara el comunicado de Moncloa dando su conformidad al debate, según el escrito al que ha tenido acceso Europa Press.
En esos 70 minutos, la Mesa calificó la iniciativa, la envió al Gobierno, Moncloa la analizó y le dio tiempo a remitir de inmediato al Congreso su conformidad para que fuera debatida.
Todo ello con el fin de que en la Junta de Portavoces, que empezaba a las doce del mediodía, el PSOE pudiera pedir que su reforma se incluyese en el Pleno de la próxima semana. Fue en vano porque necesitaba unanimidad y sus aliados de ERC y de Bildu se negaron, con lo que el primer debate se calcula para el 7 de marzo.
Esa celeridad en la concesión de la conformidad es lo que reclamó el PP con su propia reforma de la ley del 'solo sí es sí', que la registró en diciembre y que quería debatir este mes. Sin embargo, Moncloa ya avisó de que con esta proposición de ley sí que iba a agotar el plazo, que en su caso acaba en marzo.
