Para los populares, "el contencioso de Gibraltar y los posibles conflictos entre los territorios vecinos deben ser tratados por los países soberanos con responsabilidad. Es decir, entre España y Reino Unido. Por ello, el desplazar las delegaciones a la colonia británica no es más que un reconocimiento tácito de la capacidad decisoria de Gibraltar". En este sentido el PP recuerda que siempre ha defendido "tres voces y dos banderas".
Según Landaluce, "los gobiernos británico y español han desplazado sus delegaciones hasta la colonia, tratándola así como de igual entre iguales. Es más, fue el propio Caruana, actuando como anfitrión, el que se erigió como verdadero ganador, como cada vez que se reúne el Foro".
Desde las filas populares se critica que, "una vez más, los resultados de esta reunión brillaron por su ausencia y al término del encuentro volvemos a encontrarnos con un decálogo de buenas intenciones y ningún compromiso concreto. Se planteó como la preparación del encuentro interministerial a celebrar antes de final de año, pero ningún asunto de los que supuestamente iban a abordarse protagonizó las jornadas de trabajo de las delegaciones asistentes".
El diputado popular sostiene que "en una época de crisis como la que vivimos, el coste del desplazamiento de las delegaciones y su estancia en Gibraltar es un reconocimiento a la colonia a costa del dinero de todos los contribuyentes, sin que exista una conraprestación para los campogibraltareños y españoles".
Landaluce concluye apuntando que Gibraltar "es el más interesado en continuar con esta política laxa en torno a las reuniones del Foro ya que, con esta postura, Caruana sigue sumando puntos y haciéndose fuerte en su territorio, aumentando sus puntos ante la comunidad internacional, que puede ver en el protagonismo de la colonia una capacidad de decisión que no debía tener".