Se trataría de un compromiso adoptado entre el Ayuntamiento y Arcgisa, mediante el cual la empresa mancomunada instalaría contadores individuales en dichos bloques.
El Ayuntamiento, una vez que sea aprobada la propuesta de la alcaldía al Pleno, aportaría una cantidad como ayuda a esta instalación.
Con esta condición, Arcgisa asumiría la deuda de los vecinos, que ascienden a más de 40 mil euros.
Los representantes de los vecinos han recibido el anuncio de Palma con esperanza, pues significaría que cada vecino podría hacer el contrato para el suministro de agua y pagar lo que realmente consuma, evitando los cortes que regularmente sufren.
Además, este contrato servirá para, en el momento en que se puedan escriturar las viviendas, demostrar documentalmente la residencia en cada vivienda.
Paralelamente, el alcalde informó que desde el Ayuntamiento se han realizado gestiones en la comarca y en Madrid con la fiscalía, el registro de la propiedad y con notarías, al objeto de que las familias puedan escriturar sus viviendas.
Ello permitiría, además, que los vecinos pudieran hipotecar sus casas, pedir subvenciones para la rehabilitación, tanto de las viviendas como de los bloques, etc.
En estos dos bloques -continuó el primer edil- viven casi 100 familias, a los que cada dos por tres les corta el agua Arcgisa porque no pagan, y hay que recurrir a camiones cisterna y a mangueras.