El alcalde, Juan Ignacio Zoido, ya avisó a mediados de julio “de alguna que otra sorpresa” cuando se hiciesen públicas las cifras de La Ranilla. Ayer el primer edil dió la primera. Terminar las obras del interior del edificio, su equipamiento y el traslado de los efectivos policiales a la nueva sede costará 1,5 millones de euros más de lo que inicialmente presupuestó el anterior Gobierno -24,3 millones de euros-.
El Consistorio, que “no se responsabiliza de los plazos anteriores”-según el proyecto del anterior Gobierno Detea, la empresa adjudicataria, debía haber entregado el edificio hace más de un año-, se ha comprometido a “adelantar la fecha de finalización lo antes posible” a pesar de que aún no está terminada la conexión eléctrica ni se han realizado todas las pruebas para recepcionar el edificio.
“Ahora hay que presupuestar y ejecutar, ya que no estaba proyectado, el traslado y la sala de comunicaciones. Ningún proyecto corresponde con lo que se hizo, ya que había desaparecido la galería de tiro y otros elementos fundamentales”.
Como ya adelantó Viva Sevilla, los plazos de entrega de La Ranilla se demorarán más de la cuenta ya que el interior del edificio necesitaba una reestructuración al tener que unirse la sala de control y de transmisiones, que estaba en bruto, con la sala de tráfico, algo que según fuentes del Sindicato Profesional de la Policía Local (Sppme) costaría 400.000 euros.
“En el anterior proyecto había dos salas, algo totalmente innecesario. La unidad ya está unificada pero según nos consta todavía no han tirado los tabiques para agrandar la sala”, señaló a Viva Sevilla Luis Val, portavoz del Sppme, que añadió que desconocían que Zoido se hubiera reunido con Detea, así como la nueva cifra de 1,5 millones de euros.
Val indicó que el sindicato había mantenido un encuentro en la mañana de ayer con José Antonio de la Rosa, director de Seguridad de la Policía, quien les dijo que faltaban por terminar algunas obras internas de acondicionamiento.
Según ha podido saber este periódico esas obras consisten, entre otras, en la unificación de las salas de control y en convertir los calabozos en galería de tiro.
Mientras éstas concluyen, el Ayuntamiento sigue pagando a Detea 23.000 euros en concepto de alquiler por los edificios que actualmente ocupan los agentes.
El alto alquiler de Charli I y Charli II
Mientras se terminan las obras del edificio de La Ranilla, el Ayuntamiento paga un alquiler mensual de 23.000 euros -30.000, antes de que se entregara Charli III-, a Detea por los dos edificios que ocupa en La Cartuja actualmente la Policía Local.
