El primer edil realizó tales afirmaciones durante un acto multitudinario celebrado hoy por el Partido Popular en el Hotel Amaragua, en el transcurso del cual el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, y el presidente del Partido Popular de Andalucía y candidato a la presidencia de la Junta, Javier Arenas, escenificaron el compromiso del Ministerio y del PP de reformar la Ley de Costas para hacer efectivo el verdadero reconocimiento de estas instalaciones, poner fin a los problemas y amenazas de que han venido siendo objeto y garantizar definitivamente la estabilidad del sector.
La representación de este compromiso político contó con la asistencia, además del Secretario de Estado; del director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Pablo Saavedra; la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, y prácticamente todos los altos cargos del Partido Popular en la provincia, entre ellos el subdelegado del Gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar; presidente del partido en Málaga y presidente de la Diputación Provincial, Elías Bendodo; los alcaldes de Torremolinos, Málaga, Vélez, Fuengirola, Marbella, Estepona, Rincón de la Victoria y Nerja, entre otros; diputados nacionales y del Parlamento Autónomo; concejales de numerosos municipios y más de un centenar de empresarios de playas, con los respectivos responsables del colectivo en la Costa del Sol, quienes, según manifestaron una vez concluido el encuentro, mostraron su satisfacción por la celebración de un acto que supone, según la opinión unánime de autoridades y profesionales del sector turístico, un punto de inflexión en la situación de inquietud e incertidumbre que se ha venido generando durante años, motivada, según explicaron diversos intervinientes, por la errática aplicación de una Ley de Costas puesta en marcha en 1988 y necesitada, según reconocieron tanto Javier Arenas como el secretario de Estado, de una profunda revisión que otorgue definitivamente estabilidad y seguridad jurídica a los chiringuitos.
En su condición de anfitrión de este importante encuentro y de alcalde del municipio pionero de estas instalaciones, el primer edil de Torremolinos elogió el esfuerzo de los profesionales de las playas y, tras resaltar la importancia de los chiringuitos como elemento diferenciador de la oferta turística andaluza, y especialmente de la Costa del Sol, recordó también la contribución de estos negocios a la proyección de uno de los grandes atractivos turísticos de Torremolinos como es la oferta gastronómica, y en concreto el “pescaíto”.
Esta intervención se produjo después de que tomaran la palabra brevemente los portavoces del colectivo de profesionales de las instalaciones de playa, que abarrotaron el salón del Hotel Amaragua, quienes recordaron las vicisitudes que han marcado el sector en los últimos tiempos y, tras valorar muy positivamente la diligencia con la que el nuevo Gobierno presidido por Mariano Rajoy ha asumido el compromiso de dar respuesta a sus inquietudes, reiteraron la necesidad de la anunciada reforma de la Ley de Costas, expresando también su esperanza de que el texto final de la misma recoja la sensibilidad y buen criterio que presiden los aspectos de la modificación ya anunciados públicamente por los responsables del Ministerio.
El presidente del Partido Popular de Andalucía y candidato a la presidencia de la Junta, Javier Arenas, mostró su satisfacción por el éxito de la convocatoria y, tras significar la importancia económica y de los chiringuitos como parte de la personalidad del conjunto de la oferta turística de Andalucía, elogió el esfuerzo de los “chiringuiteros” en la creación de riqueza y, desde una perspectiva más amplia, aportó algunos datos que ilustran la grave situación que vive la Comunidad Autónoma, pese a tratarse de una tierra de gente trabajadora, capaz y necesitada más que nunca de gobiernos que huyan del despilfarro y la autocomplacencia.
Después de calificar el encuentro como “el fin de la operación de acoso y derribo de que han venido siendo víctimas los chiringuitos”, Javier Arenas recordó las iniciativas de su partido, siempre rechazadas, contra las medidas adoptadas contra este sector por parte de la Junta de Andalucía y, tras recordar su vinculación personal con los chiringuitos como exponente de la riqueza turística de Andalucía, concluyó que “las playas de nuestra tierra no se entienden sin los chiringuitos”.
No faltaron también palabras de Javier Arenas de explícito apoyo, solidaridad y comprensión con los profesionales de las instalaciones de playa, a quienes reconoció su esfuerzo y su necesaria complicidad, tanto en lo que respecta a contribuir al engrandecimiento de un sector vital para la economía española como es el turismo, como en su contribución efectiva en la conservación del litoral.
En este contexto, Javier Arenas dijo mostrarse muy satisfecho con la presencia en el acto de tantos alcaldes del Partido Popular correspondientes a prácticamente todos los municipios importantes de la Costa del Sol y aseguró que, en caso de ganar el Partido Popular las próximas elecciones andaluzas, “remaremos en la misma dirección que el Ministerio para favorecer la estabilidad y seguridad de los chiringuitos”, y defendió el “reformismo” como una necesidad imperiosa frente al “inmovilismo” que ha marcado hasta ahora la acción de gobierno, todo ello en pos de lograr colocar a Andalucía en el lugar puntero que le corresponde en España y en Europa de acuerdo a sus potencialidades.
Javier Arenas dijo también propugnar siempre, “y especialmente cuando se gobierna”, un espíritu de diálogo permanente que favorezca poder dar respuesta a las inquietudes de todos los colectivos sociales, incluido el que forman los empresarios de playas y emprendedores en general, y abundó en la situación actual de Andalucía ofreciendo numerosos datos comparativos sobre el crecimiento de los niveles de desempleo generados en la provincia de Málaga desde 2008.
El presidente del PP de Andalucía insistió también en que, frente a las “muchas idioteces que he tenido que escuchar”, el desarrollo económico no está reñido con la conservación del medio ambiente y, en relación “al ladrillo”, criticó las políticas y pronunciamientos que han demonizado un sector vital para el desarrollo de Andalucía, sobre como “destino residencial más importante de toda Europa”.
Finalmente, tomó la palabra el secretario de Estado del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, quien recalcó el profundo interés que, desde el primer momento, mostró el nuevo ministro, Miguel Arias Cañete, en la asunción del problema suscitado con los chiringuitos y en la articulación de los primeros trabajos para la tramitación de la reforma de la Ley de Costas que permita la resolución de ese problema, comprometiéndose a seguir manteniendo contactos en el futuro con los representantes del sector con el fin de incorporar al nuevo texto legal, a lo largo de su tramitación parlamentaria, todos los aspectos que permitan un mejor desarrollo de la importante actividad que protagonizan los chiringuitos.
Asimismo, el secretario de Estado apuntó que la “nueva” Ley de Costas incorporará planes específicos de buenas prácticas medioambientales que, en el marco de la gestión de los propios chiringuitos, contribuyan a hacer perfectamente compatible el desarrollo del sector con la conservación de nuestro litoral, apuntando asimismo el espíritu de “flexibilidad” y consenso que marcará la iniciativa del Ministerio en lo que se refiere a la definitiva resolución de la actual situación que viven las instalaciones de playa.
