Mena Lázaro ha calificado como un “enorme acto de injustica” con la comunidad educativa de este centro, que ha demostrado, desde su nacimiento hace ya una docena de años, ser un centro público comprometido con la Educación. “Uno de los 50 primeros centros TIC de Andalucía por meritos propios; con grupos flexibles en las áreas instrumentales antes incluso que la LEA los implantara; innovador, con proyectos como la experiencia ERA, de claro compromiso social con el alumnado en riesgo de abandono que finalmente consiguió llevarse un graduado y con una de las menores tasas de abandono escolar en la ESO”, dice en un comunicado.
También fue seleccionado como centro Espacio de Paz, incluso antes de que la propia Junta los implantara de manera generalizada; comprometido con la convivencia con uno de los mejores proyectos reconocido por toda la comunidad educativa; europeo, con proyectos con centros de Inglaterra, Francia, Holanda, Rumanía, etc., con una de la mejores experiencias de Escuela de Padres y Madres puestas en marcha. "En definitiva, un centro público de calidad, con una plantilla de excelentes profesionales, que ha sido y es ejemplo de renovación educativa y organizativa para otros muchos a lo largo de estos años se han interesado por su funcionamiento y le han visitado”, dice Mena Lázaro.
El sindicalista no lo considera sólo una injusticia con el centro. “Es sobre todo un desprecio a toda la ciudadanía de una parte de la ciudad de Chiclana”. Desde hace años es notorio –explica Mena- que la zona, en la que viven más de 20.000 personas, presenta un déficit de infraestructuras básicas en educación.
Con un tamaño mayor que la vecina Puerto Real, esta parte de la ciudad conocida como La Banda, -en la que se incluye académicamente el extrarradio de El Marquesado, El Pinar de los Franceses y el Pago del Humo, además del casco urbano delimitado por el río Iro-, sólo tienen dos institutos: el IES Huerta de Rosario con enseñanza postobligatoria de bachillerato y otro el IES Fernando Quiñones, con más de 700 alumnos, sin ella. En cambio, en la parte llamada El Lugar hay cuatro institutos públicos, todos ellos con enseñanzas postobligatoria, además de dos centros privados concertados.
“Esto es, hablando en plata, pura discriminación con casi un tercio de la población de Chiclana. Durante décadas, cientos de familias han visto como sus hijos e hijas para realizar unos estudios considerados por Europa como la única salida mínimamente con posibilidades, debían cruzar a la otra parte de la ciudad”.
Falta además un transporte escolar ni público eficaz, que obliga a las familias a trasladar a sus hijos o a que estos se hagan km de moto o pie diariamente. Para, además, entrar en unas aulas que durante todos estos años sobrepasan la ratio una y otra vez, “a pesar de los esfuerzos por maquillar los datos que hace su Administración”.
Ramírez recuerda que hace algunos años, otro de los centros de la ciudad inició movilizaciones y manifestaciones de diverso tipo para exigir que en sus instalaciones se impartiera la enseñanza postobligatoria. Entonces se dijo que el status quo no se movería sin que se realizase un debate y análisis sosegado
Por otro lado, que La Banda necesita enseñanza postobligatoria lo reconocieron públicamente el anterior delegado socialista y también el anterior alcalde de la ciudad. Y tras ellos, inspectores y cargos intermedios de la Delegación provincial o del gobierno municipal. Incluso se celebraron reuniones a instancias del concejal socialista de Educación para establecer las bases de la extensión de la postobligatoria en la ciudad.
“Ustedes han abierto el melón. No vale pues decir ahora desde la Delegación que se trata de un problema decidido en Sevilla y que no se puede hacer nada. No. No vale decir que el año que viene será el momento, cuando se ha pedido con tiempo y se ha demostrado paciencia, prudencia y excelencia. Estas decisiones son políticas y a nadie escapa el peso cada vez mayor de la enseñanza privada en las decisiones de un gobierno andaluz que se dice socialista y defensor de lo público pero que poco a poco van concertando hospitales, educación etc. Esta es la verdadera razón: que en la Banda la ampliación de la postobligatoria está reservada para la enseñanza concertada. Para ello ya han dado Uds. los pasos: en el 2010 cedieron un solar público a un centro religioso privado para ampliar Secundaria y FP. ¡Y después se dicen ustedes laicos y defensores de la escuela pública! ¡Venga ya!”.
Según Mena Lázaro, esto va a provocar que un buen centro se vea “marginado y cortado en su desarrollo cuando es de justicia lo que piden. Peligroso es ser responsable de ello. Sobre todo ahora que se anuncia la supresión del 4º ESO. Ustedes serán los únicos culpables del desaliento y desinterés que se generen y de la reacciones de las familias.”
