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El poniente y la crisis económica amargan el verano a los chiringuitos

Al hacer menos calor del habitual en esta época, los usuarios no consumen las mismas bebidas que cuando sopla un viento cálido.

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  • Un chiringuito. -

Los chiringuitos de la playa de Camposoto están completando uno de los veranos más ruinosos que recuerdan, puesto que a la ya consabida crisis económica se ha sumado un aliado inesperado en esta época estival: el viento de poniente. 

Y es que a nadie escapa que está siendo uno de las temporadas estivales con menos calor de los últimos años, puesto que casi el 80 por ciento de los días ha soplado ese viento que mientras que para algunos supone todo un alivio, ya que refresca las temperaturas, para otros -como es el caso de los chiringuitos- es un auténtico lastre. Ya se sabe que es el calor el que hace que la gente se acerque a las barras para refrescarse al amparo de una cerveza o un refresco y este, precisamente, no será un verano que se recuerde por el momento por sus altas temperaturas.

A apenas dos semanas para que se dé prácticamente por concluida la época fuerte del verano, puesto que en septiembre el número de usuarios de la playa desciende de manera considerable, San Fernando Información ha querido cursar la opinión de los propietarios de algunos de los chiringuitos localizados en Camposoto y todos ellos han llegado a la conclusión de que ha sido una de las temporadas estivales más flojas que se recuerdan.

Roberto Rubio es uno de los responsables del Chiringuito Manito IV, que se localiza en la última pista de la playa isleña, y afirma que “estamos asistiendo a uno de los años más tranquilos  que yo recuerde”, y en el caso de su negocio son ya 22 los veranos que está montado en Camposoto. “El tiempo no está acompañando mucho y si no hace calor, pues no se bebe”, afirma.

Sólo en el mes de agosto está notando un ligero repunte con respecto al mes de julio. “No estamos salvando, sobre todo gracias a la gente que está llegando de fuera, fundamentalmente desde Madrid o Sevilla”, aunque añade que “ni tan siquiera los sábados y los domingos se están produciendo las típicas bullas que había en años precedentes”.

‘Cactus Jack’

Prácticamente en la misma tesitura se encuentra el chiringuito Cactus Jack, pionero en la playa isleña donde se establece cada verano desde hace prácticamente un cuarto de siglo. Su responsable es Alicia Rubio y también señala que “estamos teniendo un periodo estival bastante regular, porque el poniente hace que la gente se vaya antes de la playa al hacer menos calor”.

Por otro lado, tampoco el negocio está viviendo un repunte especial durante este mes de agosto, pese a ser el de vacaciones por antonomasia. “Nosotros mismos esperábamos que la cosa cambiase, pero sinceramente está en las mismas cifras que en julio”, afirma Rubio, quien señala que en su establecimiento está observando presencia de clientes de Madrid, Sevilla y País Vasco.

 Por último, hace un llamamiento sobre el “daño” que a los chiringuitos está causando la “venta ambulante de productos como refrescos o patatas. A nosotros nos cuesta mucho dinero abrir el negocio y yo asumo todas las responsabilidades si a alguien le pasa algo con un producto que consuma en mi chiringuito. Sin embargo, a estas personas quién les puede reclamar”.

 Por último, Pedro García está al frente del chiringuito Antonio I, que lleva 22 años en la playa, aunque en los dos últimos en la zona de la curva de acceso a Camposoto. “Entre que no hay dinero y que contra el viento de poniente no se puede luchar, lo cierto es que la situación está regular”.

A ello se une que en su caso particular de que no hay parada del autobús especial de playa. “Muchos de mis clientes de toda la vida se quejan de que ya no pueden venir porque no hay parada y el autobús les deja bastante lejos”. Por último, aunque son muchos los turistas que van a su negocio, afirma que “el 80 por ciento de mis clientes de muchos años he logrado que se vengan aquí”.

La Escuela de Surf se mantiene

La Escuela de Surf de Camposoto cumple su segundo verano consecutivo en la playa y, pese a la situación de crisis, está manteniendo los mismos niveles de alumnos de la edición de 2011, lo que viene a corroborar que dicha iniciativa que había estado coleando durante muchos años se ha convertido en un nuevo referente que hace más atractiva si cabe a la playa isleña.

Antonio Conesa es, junto a Fernando Porras, uno de los responsables de la misma, y destaca que la escuela es “la más barata que hay en toda la provincia, puesto que por cien euros los alumnos reciben clases de lunes a viernes, además de que todo el material lo ponemos nosotros”.

“Estamos registrando los mismos números de afluencia de personas que se interesan por aprender surf que el año pasado, aunque también somos conscientes de que en los momentos actuales de crisis hay muchas familias que no tienen capacidad para poder pagar este tipo de clases. Es por ello que, ante esta situación, nosotros incluso para facilitar el acceso a las clases hemos mantenido los mismos precios que cobramos el verano pasado”.

La intención de los responsables de la Escuela de Surf de Camposoto es que su actividad se prolongue durante todo el año y no

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