La Oficina Municipal de Información al Consumidor hace llegar una serie de recomendaciones cuando se aproxima el final del mes de agosto, que este año 2012 coincide con el fin de semana, el día 31 es viernes, por lo que es de esperar un tráfico intenso en las carreteras  El objetivo no es otro que el aportar el imprescindible grano de arena para que quienes estudian el regreso a casa, tengan en cuenta diversos aspectos para que  dicho desplazamiento sea lo más cómodo y seguro posible.
 

Prevención y prudencia:

Como se informa desde la Dirección General de Tráfico pese a que la conducción en verano se realiza en condiciones meteorológicas más benévolas que en otras épocas del año, el tráfico presenta otras dificultades que inciden negativamente en la conducción como son el mayor número de desplazamientos y por tanto una mayor intensidad circulatoria; mayor tendencia a la conducción nocturna y mayor número de trayectos de largo recorrido.

Por otra parte, como se señaló a través del informe EuroRAP del Real Automóvil Club de España (RACE) sobre siniestralidad e índice de riesgo de la Red de Carreteras del Estado  “no hay que olvidar que muchos de los que se encuentran de vacaciones comienzan a mirar el calendario y suman los días que les restan de descanso, etapa en la que la relajación va dando paso a nerviosismo, cansancio y cierta desgana por retornar al ambiente laboral y la rutina cotidiana. Como consecuencia de ello, cuando nos estamos acercando nuevamente al trabajo, emocionalmente se pueden presentar problemas de vulnerabilidad, lo cual puede conllevar que los sistemas de defensa estén bajos y nos encontremos con una situación más hostil, que es la vuelta al trabajo, al colegio, y el estrés económico.

Por este motivo, la prevención y la prudencia son las dos reglas básicas que permitirán al conductor afrontar cualquier dificultad que se le presente.  Por ello de cara a un retorno seguro a casa todos estos factores tienen que ser superados con algo tan elemental como es la organización, y organizar el retorno seguro requiere tener en cuenta  que si el viaje fue realizado en un vehículo particular, programe el regreso con antelación, evitando, en la medida de lo posible los días de mayor afluencia de tráfico. Asimismo la Oficina Municipal de Información al Consumidor del Ayuntamiento de Torremolinos destaca que el Comisariado Europeo del Automóvil (CEA) ha preparado un completo plan de recomendaciones que se complementan con otras, por ejemplo de la Dirección General de Tráfico, y que se resumen en las siguientes líneas.

Antes de partir:

El botiquín. En diversos países de Europa, una normativa obliga a llevar un  botiquín de primeros auxilios en los vehículos. Es el caso de Alemania, Austria, Grecia, República Checa o Bélgica. En España, aunque las distintas autoridades lo recomiendan, no es obligatorio. Resulta obvio que los elementos que compondrán el botiquín dependerán de las circunstancias médicas y personales de cada viajero, así como las condiciones del lugar de destino. Desde la Dirección General de Tráfico(DGT), recomiendan incluir siempre que se realicen viajes por carretera un botiquín, en el cual además de los fármacos habituales en caso de enfermedad o alergias se disponga de los siguientes componentes: antipiréticos, analgésicos, tiritas, alcohol, agua oxigenada, termómetro, tijeras, algodón, esparadrapo, compresas de gasa estéril, repelentes y pomadas para picaduras, y cremas protectoras para el sol

Los triángulos son unos de los objetos obligatorios que se tienen que llevar en el coche, para advertir de un accidente o avería.  También es obligatorio  el Chaleco reflectante y ponérselo en el momento que se baje del coche por avería o accidente. Es la mejor manera de que lo vea el resto de conductores y evitar así un atropello. Lo correcto es tenerlo  siempre a mano, pero sin colocarlo en el respaldo del asiento, pues además de que los rayos del sol queman las bandas retroluminiscentes.

Se recomienda estudiar el trayecto con antelación. Conozca bien el camino, las rutas alternativas, donde comer, donde repostar e incluso donde dormir. La DGT ofrece gratuitamente información del estado de la circulación y de las incidencias que pueden afectarla, desde teléfono móvil, Internet, teletexto, teléfono fijo y en los boletines informativos de radio

No olvide tener a mano el teléfono de su compañía de asistencia en viaje. En caso de incidencia dispone de un recurso que le evitará sobresaltos.

Compruebe todos los niveles del vehículo: agua, aceite, líquido para el limpiaparabrisas o líquido de frenos.

Observe el dibujo de los neumáticos y la banda de rodadura. Vigile la presión conforme a las medidas que le indique el fabricante para los casos de carga elevada, incluida la rueda de repuesto.
 

Evite el exceso de equipaje y, siempre que sea posible, no utilice la baca del vehículo. Vigile que no existen elementos sueltos en el interior del habitáculo, ya que en caso de frenada brusca se pueden convertir en «proyectiles».
 

Ante el riesgo de lluvia, los limpiaparabrisas deben estar en perfecto estado.
 

Durante el viaje:

Es preferible viajar durante el día, sobre todo si tiene problemas de vista o es proclive a quedarse dormido.
 

Si se viaja con niños hay que buscar las horas de menor radiación solar (mañana o atardecer), y hacer paradas periódicas. Eso tranquiliza a los pequeños.

Durante el viaje realizar descansos cada dos horas aproximadamente. La desatención en la conducción es el

principal factor desencadenante de accidentes graves.
 

No se fije una hora de llegada a su destino, con ello sólo conseguirá ponerse más nervioso y realizar una conducción imprudente. Al más mínimo síntoma de cansancio, pare durante al menos 15 minutos, tome aire o descanse el  tiempo necesario.
 

Utilice ropa cómoda y holgada.

Cuando circule por la noche, disponga siempre de aire fresco y de una música animada; evitará la somnolencia.

Si tiene que comer, beber, hágalo mientras para a descansar.

Utilizar siempre, en cualquier desplazamiento, los sistemas de seguridad adecuados. Cinturón, casco o sillas infantiles salvan vidas.

La velocidad debe ser adecuada a las circunstancias y a la vía por la que circulamos. En autopistas y autovías la velocidad máxima permitida para turismos y motocicletas es de 120 km/h.

Cero alcohol y drogas durante la conducción.