La patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Morón de la Frontera (Sevilla) ha imputado a un hombre, identificado como R.R.A., por un delito de hurto, al tener en su poder un galgo denunciado como robado y valorado en 3.500 euros. Además, los agentes denunciaron a esta persona y a otras tres más por infracción administrativa a la Ley de Caza.
Los hechos sucedieron cuando la patrulla del Seprona procedió a identificar a cuatro personas que estaban cazando en un coto por la modalidad de caza de liebres con galgo. Debido a que estas personas no tenían autorización del titular del coto, fueron denunciadas por sendas infracciones administrativas, ha informado el Instituto Armado en una nota.
La Guardia Civil procedió a identificar también a los perros, en concreto cuatro perros galgos que, según los denunciados, eran propiedad de uno de los identificados. Tras ello, se rastreó a los animales con un lector de microchips homologado y se consultó la base de datos de la Benemérita. El resultado fue que una perra de las rastreadas había sido denunciada por su dueño en Jerez de la frontera (Cádiz).
En la denuncia consultada, el dueño de la perra decía que se la habían sustraído aprovechando un descuido, ya que el recinto donde estaba el animal se encontraba momentáneamente abierto y sin vigilancia. Una vez que la Guardia Civil se puso en contacto con el denunciante, éste ratificó su denuncia y acreditó la titularidad del perro.
