El diputado socialista José María Román ha anunciado este miércoles en el Pleno ordinario de la Diputación Provincial de Cádiz que tiene intención de dejar su "efímera" Portavocía del Grupo, con alusiones a la "coherencia" y señalando que "hay vida después" de ello.
Antes de defender la postura del Grupo Socialista en relación a los Presupuestos para 2013 de la Corporación, Román ha asegurado que "hay vida después de la Portavocía", la cual ha anunciado que dejará de ejercer, lo que permitiría zanjar la crisis abierta en el seno del Grupo.
Cabe recordar que las discrepancias surgieron después de que Román se negara a asumir una serie de directrices del partido, las cuales pasaban por realizar ciertos cambios en el personal de confianza del Grupo en la Diputación, que el partido controle directamente la asignación mensual que recibe el Grupo y que cualquier gestión o reunión que se realice por parte de éste en la provincia cuente, previamente, con el visto bueno del partido.
Ante eso, la Ejecutiva propuso que la secretaria general del partido en Cádiz y presidenta del Grupo de Diputación, Irene García, relevase a Román. Sin embargo, contó con la oposición de seis diputados --la mitad del grupo--, no llegando a lograr la mayoría necesaria que marcan los estatutos de la Diputación para llevar a cabo ese cambio.
La Ejecutiva Regional del PSOE-A tomó cartas en el asunto, instando a los seis diputados díscolos a que firmaran un documento en apoyo al relevo señalado. La negativa de éstos derivó en la apertura de un expediente disciplinario que podría culminar con la expulsión del partido de estos diputados.
La propia Irene García aseguraba antes del Pleno que era "optimista" en el sentido de que en esta jornada pudiera alcanzarse un acuerdo que zanjara definitivamente el asunto, como parece que ocurrirá después de que Román haya anunciado su renuncia.
