El jurado popular ha declarado culpable de asesinato al acusado de matar a su vecino, asestándole dos puñaladas con un cuchillo tras discutir con él en la calle, en la localidad de Pinos Puente (Granada), considerando probado por una mayoría de votos que lo hizo con alevosía, dejando sin posibilidad de defensa a su víctima, han informado a Europa Press fuentes del caso.
Tras el veredicto del jurado, la Fiscalía ha modificado su petición de condena, de 12 años de cárcel por homicidio, a 15 por asesinato para el inculpado, Manuel J.C., de 40 años y con antecedentes penales. La acusación particular, representada por el letrado Francisco Ruiz Baena, que inicialmente ya enmarcó los hechos en un asesinato, ha mantenido su solicitud de 20 años de cárcel, y 120.000 euros en concepto de responsabilidad civil para la viuda y los cuatro hijos del fallecido.
El tribunal popular no ha creído la versión del inculpado, que en la primera sesión del juicio aseguró que se defendió de una agresión y que todo ocurrió en el transcurso de un "forcejeo", de manera que el apuñalamiento fue algo accidental.
Los hechos se remontan a las 15,00 horas del 10 de abril de 2012, cuando el procesado se encontraba haciendo la mudanza de su vivienda, ubicada en la calle Santa Clara de Pinos Puente.
Entonces apareció en el lugar un vecino que, tras dirigirse a él de forma "desafiante", le dijo "¿por qué me miras? ¿Es que me estás perdonando la vida?", y comenzó a insultarle, iniciándose entre ambos una pelea. Un vecino común los separó, pero ellos continuaron discutiendo e insultándose, lo que determinó que la pelea se reanudase de nuevo.
En el transcurso de la disputa, el acusado se hizo con un cuchillo con el que, "con ánimo de acabar con su vida", atacó al otro hombre, al que le asestó dos puñaladas en la zona del tórax, según consta en el escrito de acusación de la Fiscalía.
Según el informe de la autopsia, la víctima sufrió dos puñaladas que le causaron dos heridas por arma blanca: la primera afectó sólo al tejido celular subcutáneo, y fue equidistante 8 centímetros de la unión clavículo-esternal, pero la otra resultó mortal, porque llegó a los dos lóbulos del pulmón izquierdo. Por ello, falleció tan solo 40 minutos después de iniciar la discusión, a las 15,40 horas de ese mismo día, sin que se pudieran ya practicar maniobras de reanimación cuando llegó el servicio de urgencias.
El fallecido, de 44 años, estaba casado, y tenía cuatro hijos menores de edad.