Los aledaños del Ayuntamiento de Sevilla han sido este jueves el escenario de una concentración celebrada por los sindicatos del consistorio e IU-CA contra la reforma de la Administración local que promueve el Gobierno central del PP.
La movilización surge a cuenta del proyecto de Ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local que promueve el Gobierno central del popular Mariano Rajoy. Dicho proyecto de ley, entre otras cosas, está destinado a "evitar duplicidades de competencias" entre las administraciones, "racionalizar la estructura organizativa de la Administración local de acuerdo con los principios de eficiencia, estabilidad y sostenibilidad financiera y favorecer la iniciativa económica privada evitando intervenciones administrativas desproporcionadas".
Así, y por ejemplo, esta nueva regulación impide "la participación o constitución de entidades instrumentales por las entidades locales cuando estén sujetas a un plan económico o un plan de ajuste" y "suprime monopolios municipales heredados del pasado y que recaen sobre sectores económicos pujantes", reservando al Estado "las normas sobre los procedimientos de control, metodología de aplicación, criterios de actuación, así como derechos y deberes en el desarrollo de las funciones públicas necesarias en todas las corporaciones locales".
Merced a menciones como las descritas en estos párrafos, el portavoz municipal de IU-CA en Sevilla, Antonio Rodrigo Torrijos, advierte de que esta nueva regulación que prepara el Gobierno central del PP implica "una gran involución democrática", sobre todo en lo que se refiere a los municipios de menos de 20.000 habitantes, a las que resta capacidad de intervención "en servicios de educación, empleo y de asuntos sociales".
Igualmente, el portavoz municipal de IU-CA censura que esta reforma de la Administración local oculte un intento de "recuperar nicho de mercado para las empresas privadas" precisamente a través de aspectos que recaían en las Corporaciones locales, todo ello cuando el sector privado, precisamente, necesita salir del "fiasco del boom inmobiliario".