El servicio de autobuses urbanos se encuentra desde hoy en manos del Ayuntamiento, después de que en el día de ayer se resolviera de manera definitiva la relación contractual que cedió la gestión a la empresa privada Urbanos Amarillos. Se trata además de un hecho histórico por cuanto anteriormente este servicio había sido igualmente explotado por otras compañías privadas, como Cojetusa o Transportes Aura, entre otras.
La resolución del contrato fue aprobada ayer por la Junta de Gobierno Local después de recibirse un dictamen favorable del Consejo Consultivo de Andalucía, que una vez escuchadas las partes ha concluido que “resulta aplicable la causa de resolución” toda vez que la adjudicataria del servicio ha “incumplido sus obligaciones contractuales”, algo que ha quedado “demostrado” en el preceptivo expediente y que incluso cuenta con “sentencia judicial” favorable.
El dictamen refleja además como “hecho debidamente acreditado” en el expediente presentado por el Ayuntamiento “que el concesionario ha incurrido en los incumplimientos contractuales que estaban previstos como obligaciones en el pliego de condiciones del servicio, obligación que ha de ser considerada esencial pues se refiere al objeto mismo del contrato”.
Como paso previo, la Junta de Gobierno Local aprobó el pasado 31 de marzo la incoación del procedimiento de resolución con la citada concesionaria para la gestión del servicio de transporte.
Agotado el plazo máximo
La resolución se produjo justo un día antes de que venciera el periodo máximo de dos años de secuestro de la concesión, que desde el 7 de mayo de 2012 venía permitiendo que los técnicos municipales garantizaran la correcta prestación del servicio.
Era necesario por tanto adoptar algún tipo de determinación al respecto, ya que en caso contrario Urbanos Amarillos tendría derecho a recuperar el control del transporte urbano. Una vez rescatada la concesión, el Ayuntamiento puede optar por la explotación directa del servicio o por ofrecerlo a una nueva empresa. Sin embargo, el Gobierno local ya se comprometió meses atrás a gestionar el servicio con sus propios medios.
En principio, será la empresa pública Corporación Municipal de Jerez S.A. (Comujesa) quien se haga cargo de la plantilla, que mantendrá las condiciones actuales. De este modo se cumple el compromiso adquirido con los empleados, que han ido de la mano del Consistorio en todo el proceso.
“No ha sido posible llegar a un acuerdo con Urbanos”
La alcaldesa, María José García-Pelayo, recordó ayer que “la normalización de este servicio básico para la ciudad ha sido una prioridad desde el inicio de legislatura para el Gobierno local y por ello se ha estado trabajando, desde el primer día, para garantizar su buen funcionamiento”.
Asimismo, aclaró que “se ha estado en negociaciones con la empresa para intentar llegar a un acuerdo, si bien éste no ha sido posible ya que Urbanos Amarillos pedía en torno a 10 millones de euros por dejar de prestar el servicio en Jerez”. “Es una cuantía que no compartimos en absoluto, y por ello planteamos la resolución en Junta de Gobierno, ante la falta de acuerdo con la concesionaria y sus incumplimientos; todo ello avalado por el dictamen del Consejo Consultivo”, añadió.
Por su parte, el portavoz del grupo socialista, Luis Flor, advirtió de que el Gobierno local “no dice toda la verdad” al respecto de este asunto, ya que la empresa “no pide 10 millones para marcharse, sino la devolución del aval, que era de 7,5 millones de euros”. Además, se mostró convencido de que el Ayuntamiento se ha limitado a "dar una patada hacia adelante" al problema de los autobuses urbanos.
