Al Colegio Oficial de Arquitectos de Málaga no le convence el proyecto de 'manzana verde' diseñado por el Consistorio de la capital para levantar en El Duende una ciudad bajo criterios de sostenibilidad ambiental, integración social y eficiencia energética. Así, ha advertido de que, aunque se cumple la norma, "el Ayuntamiento se hace trampas al solitario" y "nos quiere vender una actuación como modélica cuando al final va a ser el mismo urbanismo de siempre".
De este modo se refleja en las alegaciones presentadas por la entidad colegial a la aprobación inicial del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) Manzana Verde, según ha señalado a Europa Press su decano, Antonio Vargas: "es un planeamiento legal, pero tramposo; se vende mejor de lo que es realmente; es un desarrollo más de la ciudad, un desarrollo de planeamiento comercial".
"Se intenta presentar este planeamiento como modelo de urbanismo sostenible del siglo XXI desde el punto de vista medioambiental y de la sostenibilidad, pero, sin embargo, presenta errores de bulto", ha criticado el representante de los arquitectos malagueños, quien ha hecho hincapié en que si se cumplieran los estándares propios de un proyecto de este tipo, podría ser una intervención "muy interesante".
Y es que, tal y como ha resaltado Vargas, "el PERI cumple la normativa, pero, sin embargo, no contempla el mejor aprovechamiento bioclimático; no hay conexión entre las dos partes en las que se divide ni homogeneidad entre ambas; hay espacios libres bastante duros; aunque haya zonas verdes, no se está ante estándares modélicos, y hay una carencia absoluta de reserva de suelo para equipamiento educativo".
En concreto, el decano del Colegio de Arquitectos ha insistido en que un planeamiento de este tipo debería intentar que "la ordenación de los edificios fuera la más adecuada desde un punto de vista bioclimático, de aprovechamiento de la luz del sol, el calor, etcétera". Sin embargo, ha especificado que, "conforme al arco solar, la prevista no es la más correcta".
Para la entidad colegial, "no tiene sentido" tampoco la división en dos zonas del PERI, que se traduce en dos espacios con "edificabilidades y densidades muy diferentes". "Es legal, pero la realidad es que, dentro del mismo suelo urbano no consolidado, hay dos partes que se enfocan de manera muy distinta: en una está la 'manzana verde', una actuación más pública, y en otra es donde se concentra la acción privada", ha manifestado.
Así, ha apuntado Vargas, todas las Viviendas de Protección Oficial (VPO) previstas se concentran en la 'manzana verde', mientras que en la otra parte estarían las de renta libre, una distribución que ha considerado un "error".
"Los procesos urbanísticos de sostenibilidad deberían ir hacia una distribución más homogénea de las VPO y no a su concentración, dando lugar a una especie de gueto", ha defendido. Ante esto, se ha preguntado "por qué, en lugar de eso, no se reparten las viviendas protegidas de forma más homogénea en toda la zona", lo que se traduciría, consecuentemente, en "densidades y edificabilidades más similares también".
Precisamente, ha incidido en que, aunque los coeficientes de aprovechamiento estén recogidos en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), quizá es el momento de su modificación, teniendo en cuenta que los del actual planeamiento "han quedado desfasados por la crisis". "Sin embargo, esa realidad se ha ignorado, dejando el tema en todo caso para otro momento, que no sabemos cuándo será", ha aseverado.
Según Vargas, en el momento actual "no hay mucha diferencia" en términos económicos entre una VPO y una vivienda de renta libre, por lo que los coeficientes de aprovechamiento tendrían que ser "más similares" entre ambas construcciones. En este sentido, ha considerado que "si quieren presentar el PERI como un planeamiento modélico, podían haber modificado esos factores".
En sus alegaciones, el Colegio de Arquitectos de Málaga también cuestiona los indicadores de zonas verdes, y es que, "aunque se cumplen los estándares del PGOU, se cuentan como tales los espacios peatonales de las calles, aquellos residuales entre edificios". "Pueden ser espacios libres, pero no son verdes", ha alertado.
Se denuncia, igualmente, que "la ordenación llevada a cabo alicate el espacio público". Según ha comentado, "la manzana verde mete los aparcamientos debajo del viario público y se hace por un criterio puramente de promotor privado porque es más barato". "Ello impide, sin embargo --ha precisado--, que en la parte superior se pongan árboles, derivando en espacios como por ejemplo la plaza de la Marina o de Camas".
EQUIPAMIENTOS EDUCATIVOS
Sobre los metros cuadrados destinados a equipamiento, desde la entidad profesional se han mostrado igualmente críticos, ya que, aunque, al ser un suelo urbano no consolidado, no exista una obligación estricta de cumplir el Reglamento de Planeamiento, "no se hace una reserva para centros escolares". "Se proyectan más de 2.000 viviendas en esta unidad de ejecución y no se contempla espacio para un colegio", ha subrayado.
El proyecto de 'manzana verde', impulsado por el Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU) de Málaga, desarrolla el ordenamiento urbanístico del área de El Duende, donde, actualmente, se localizan los Servicios Operativos municipales y la Empresa Malagueña de Transportes (EMT).
Derivado del programa europeo CAT-MED, el proyecto urbano ha pretendido innovar el habitual instrumento de planeamiento de modo que detallara de forma precisa e integrada la disposición de los diferentes usos e intensidades de edificación, su ordenación de volúmenes, el soleamiento de los edificios a lo largo del año o la situación del tráfico y la movilidad de la zona.