| A falta de confirmación oficial, a la espera de que Orúe tenga el alta médica, la singladura del primer entrenador en la historia del Xerez Deportivo Fútbol Club se ha terminado. La junta directiva ya tenía decidido el cese desde hace unos días, aunque se quería visualizar en la reunión de cada lunes. Una reunión de carácter ordinario, con otros asuntos sobre la mesa, pero con protagonismo principal para el adiós del entrenador que ha logrado dos ascensos consecutivos, con números de auténtico ensueño. Las razones son claras, las diferencias existentes entre el técnico y la plantilla de jugadores. Los jugadores se han plantado ante la directiva y la directiva ha tenido que decidir.
Oficialmente, por otra parte, tampoco se quiere hablar de nombres que puedan asumir el relevo del entrenador jerezano y que asuma el reto de llevar al equipo, en dos temporadas, a la Tercera División. Ha sonado el nombre de Dani Pendín, aunque todo hace indicar que hay una mayoría de directivos que no quieren que la solución salga de casa y se le quiere dar tiempo a los ascenso al primer equipo bien del propio Dani Pendín o bien de Romerito. Hay entrenadores que actualmente están jugando promoción de ascenso, que tienen bastante cercanía con directivos que se encuentran trabajando en el área deportiva, que serían muy bien vistos. El nombre o los nombres ya están encima de la mesa, aunque habría que negociar con ellos, ya que en algunos de los casos tienen contrato en vigor con sus equipos.
Habrá que esperar el devenir de los acontecimientos en las próximas fechas. Y tal vez solo haya que esperar una semana para conocer el nombre del hombre que va a dirigir los destinos de la entidad xerecista al menos en las dos próximas campañas.
Habrá que ver igualmente si el cese de Carlos Orúe conlleva también el adiós de los que han sido sus colaboradores en el cuerpo técnico, caso del preparador físico o del entrenador de porteros. Son temas que se han comenzado a debatir y de los que tendrá también que hablar el próximo entrenador.