Cuando menos se apostaba por el Cádiz CF llegó un triunfo que cargó de moral a la plantilla gaditana. En el campo del líder y con solvencia, así se impusieron los de Claudio Barragán al Real Murcia.
Los últimos minutos fueron una lección de saber parar el juego, de llevar el peso del partido y de aliarse con el reloj por parte de los cadistas, que en esta ocasión sí dieron muestras de la experiencia que se les presupone.
El lunar fue la amonestación vista por David Sánchez, que supone su quinta cartulina amarilla y un partido de sanción que, tras no prosperar el recurso para que le fuera retirada, deberá cumplir justo ante su exequipo.
Ahora el objetivo del Cádiz no es otro que reconquistar a su público ganando en el Ramón de Carranza.
A partir de ahí, mejorar la clasificación todo lo posible, aunque los ochos puntos que forman la brecha con el líder siguen pareciendo insalvables.
Partido a partido, a lo Simeone
Partido a partido, como Simeone, no queda otra. Y de momento el primer rival de esta recta final liguera es la UD Melilla, un equipo del que Claudio Barragán no se fía un pelo. “Delante tendremos un rival complicado”, adelanta el entrenador cadista, para quien “los ánimos siempre están igual, independientemente de lo que fue el partido en Murcia, después de ganar la semana llega más motivante, los futbolistas están con más hambre y eso hay que reflejarlo en el terreno de juego”. “Saber estar, coraje y competir", es su mensaje.
Apunta Claudio que el Melilla ha cambiado su forma de jugar en su lucha por mantener una categoría que cada jornada le viene más grande. “Desde la goleada que encajaron en Lorca han cambiado su manera de defender, acumulan más hombres detrás, se juntan mucho y es difícil de poder hacerle daño”, explica el valenciano, que para contrarrestar este asunto ha “trabajado mucho toda la semana para intentar batir esa línea defensiva porque lo primero que quieren conseguir ellos es no encajar, así que debemos ser fuertes”.
Claudio Barragán solicita algo también a la sufrida afición cadista, harta de sinsabores un año tras otro: “que haya el ambiente que haya nos tiene que favorecer más todavía”.
“Ganemos o no, siempre vamos a trabajar con la misma serenidad y la humildad, aunque luego está el factor de acertar en los momentos puntuales”, adelanta el entrenador, que de nuevo repetirá su política de rotaciones y hará varios cambios en el equipo.
Algunos de estos cambios serán obligados, ya que no podrá contar ni con los sancionados Carlos Calvo, Mantecón y David Sánchez, ni con el lesionado Fran Machado, quedando como duda Dani Güiza, a quien se había dado como baja segura, pero ha trabajado a tope para acortar su plazo de recuperación y ya entrena con el grupo. No se forzará al delantero jerezano, pero no es descartable que entre en la lista de convocados.
Juegue quien juegue, al entrenador no le cabe “la menor duda de mi equipo, de mis jugadores, tengo plena confianza en ellos y por tanto sé que hay jugadores que pueden dar mucho más de sí”.
“Siempre somos respetuosos con el rival, que nos quieran poner el rol de favoritos, eso no debe desviarnos del camino”, aclara el técnico, aunque precisamente no ser favoritos ayudó a jugar con más tranquilidad en Murcia.
