Viernes 22 de abril, 12.30 horas: se confirma la aparición de la pequeña talla de madera de San Antonio de Padua que fue sustraída el pasado fin de semana de la hornacina que la custodiaba en la fachada de la parroquia de San Francisco de Arcos. La sagrada imagen, posiblemente de mediados del pasado siglo y de autor desconocido, se encontraba en las dependencias de la Guardia Civil tras las investigaciones realizadas a lo largo de la semana, las cuales han culminado con la detención de un vecino de Arcos, al parecer reincidente. La propia Guardia Civil admite que se trata de un robo inaudito al menos en la demarcación que corresponde. La imagen fue robada entre la noche del pasado viernes y madrugada siguiente, para lo cual forzaron la cerradura de la hornacina situada en el lado izquierdo de la fachada parroquial.
La talla fue entregada personalmente por el sargento de puesto a la hermandad de San Antonio, propietaria de la pequeña obra de arte. La hermana mayor, Rosaría María Roldán, y el teniente Hermano Mayor, Manuel Iglesias, acogieron con gran alegría la imagen para devolverla de inmediato al lugar donde corresponde. Ambos admitían en cierto modo que a partir de ahora tendrán, si cabe, un mayor cariño hacia la imagen de San Antonio. Rosaría María Roldán reconocía el “revuelo” que ha ocasionado el robo de la talla entre los feligreses de San Francisco y, particularmente, de la hermandad de San Antonio.
La Guardia Civil tuvo conocimiento del robo el pasado fin de de semana y a través de las investigaciones del propio cuartel en Arcos halló esta imagen que, con independencia de su valor artístico o histórico, atesora especial significado por la hermandad, pues viene a ser una réplica de la talla que cada Martes Santo recorre en procesión las calles de Arcos. Como anécdota, este medio ha sabido que el ladrón intentó vender la imagen en un negocio local como "un recuerdo familiar", lo cual, aunque no ha sido confirmado, pudo arrojar alguna pista a la investigación policial.
