Lucía el sol como sendero del alba cuando los relojes en Triana marcaban las nueve de la mañana. Día grande en un barrio de pasiones que recibía entre la multitud de sus peregrinos y vecinos a la “Chiquitita” de la calle Evangelista, la devoción de miles de rocieros que cada año caminan con la hermandad decana de Sevilla.
La carreta de plata, tapiada por un inmenso plástico que a la postre la cubriría de las intensas lluvias de la mañana, aguardaba la salida del Bendito Simpecado a la par que una decena de cohetes anunciaban la salida de este por el dintel de la capilla.
No faltaran las palmas, los vítores y las rumbas y sevillanas del popular coro de la hermandad. “Que se cuelguen los balcones y las calles con romero”, resonaba entre las callejas del barrio camino hacia San Jacinto para visitar a la Estrella. Luego, se adentró en el corazón de Castilla para encontrarse con La O y el Cachorro en una calle engalanada cual costumbre rociera de los más viejos vecinos de Triana. Frente al Cristo de la Expiración los miles de peregrinos y las 26 carretas de bueyes le dijeron hasta pronto a sus casas. Y entonces apareció la lluvia, cual llanto de un barrio que echará de menos a su “Chiquitita”.
Y en la otra orilla, allá en el fervor macareno, 500 peregrinos comenzaron su romería con su particular y lúcida carreta de plata, obra de Juan Borrero. En un año muy especial, pues se celebra el 25 aniversario del primer camino de la Hermandad del Rocío de la Macarena, la número 83 entre las 117 filiales.
Eran las 08.15 horas cuando el Simpecado ocupó su lugar en la carreta tras el primer “viva” lanzado al aire saliendo de San Gil. Y de allí a las plantas de la Esperanza, cruzando el arco en los confines de la muralla. Momentos de mucha emoción contenida cuando, frente a frente, se fusionaron dos devociones tan universales como son la Esperanza Macarena y la Virgen del Rocío.
Tan universal como lo es el Gran Poder de San Lorenzo, por donde los romeros pasaron antes de despiderse de la ciudad y cruzar a la otra orilla del Guadalquivir. En ese instante, la lluvia apareció pero impidió que la Macarena continuara con su caminar.
Gines y su pueblo se van al Rocío
Pocas son las sevillanas que puedan definir el sentimiento que muestra Gines cuando llega el Rocío. Este miércoles, con un pueblo volcado, salían sus populares carretas, una salida declarada como Fiesta de Interés Turístico de Andalucía. Los “cantes” de Gines acompasaron el caminar de la carreta de plata por las calles de la localidad antes de marchar a Bormujos.
Sevilla y Sevilla Sur cierran este jueves el cupo
Este jueves salen las dos últimas hermandades del Rocío de la capital. A las nueve de la mañana, tanto la de Sevilla desde el Salvador, como la de Sevilla Sur desde San Juan de Ávila, pondrán rumbo a la aldea rociera. La primera, la más céntrica, discurrirá por enclaves como la Catedral o el Ayuntamiento hispalense. Y la segunda hará lo propio con el colegio de las Mercedes o la iglesia de Santa Genoveva.