Las autoridades indonesias reanudaron hoy las tareas de búsqueda de 17 desaparecidos en el naufragio de un barco que se incendió el Día de Año Nuevo, causando al menos 23 muertos y 31 heridos, cerca de la isla de Java.
"Lamento el accidente del barco Zahro Express. Rezo por que los que murieron en el accidente estén en un lugar bueno con Dios y que aquellos desaparecidos sean encontrados pronto", escribió hoy en su cuenta de Twitter el vicepresidente indonesio, Jusuf Kalla.
Once heridos ya han sido dados de alta en el hospital Atma Jaya en Yakarta donde fueron ingresados tras el incendio en el Zahro Express, en el que viajaban más de 200 personas, informó Bagus Panjie, de la Unidad de Urgencias, según el diario The Jakarta Post.
La Policía investiga las circunstancias del incendio, que según los primeros indicios se produjo debido al cortocircuito de un generador en la proa del barco, que cubría el trayecto entre Yakarta y el archipiélago de las Mil Islas.
En un principio se especulaba un exceso de pasajeros, pero luego el director de Transporte Marítimo indonesio, Antonius Budiyono, dijo que el navío, de 106 toneladas y fabricado en 2013, tenía capacidad para 285 personas.
Budiyono precisó que el Zahro Express pasó con éxito una inspección rutinaria el pasado 22 de diciembre.
El capitán, que supuestamente saltó por la borda sin advertir a los pasajeros, y otros tres miembros de la tripulación fueron interrogados por la Policía, que de momento no ha presentado cargos contra ninguno de ellos.
El jefe del departamento de Bomberos del norte de Yakarta, Satriadi Gunawan, acusó ayer al capitán del Zahro Express, cuyo nombre no reveló, de agravar la situación porque en vez de dar la alerta a los pasajeros y dirigir la evacuación de éstos, optó por salvarse.
Los pasajeros se dieron cuenta del incendio por la ola de calor y el humo negro que comenzó a brotar de la proa y extenderse por toda la embarcación, con más rapidez cuando entró en contacto con el depósito de carburante, según testigos citados por los medios locales.
Algunos pasajeros se echaron al mar con flotadores y en botes salvavidas, pero otros se zambulleron directamente en el agua.
Los servicios de emergencia rescataron a 194 pasajeros, en su mayoría indonesios que iban a pasar el día en la isla de Tidung, mientras que el barco chamuscado fue remolcado a un puerto de Yakarta.
"Quince minutos después de partir, la gente en la parte trasera del bote empezó a hacer ruido. Entonces vi el humo, había más y más, el barco estaba llena de gente que peleaba por los chalecos salvavidas", relató Evi, una pasajera a la cadena Metro TV.
Otra superviviente, Juju Rukminigsih, explicó que alguien le quitó el chaleco salvavidas antes de que éste pudiera saltar al agua para huir de las llamas.
Pescadores de la zona rescataron a decenas de pasajeros, algunos de los cuales sufrían quemaduras.
Docenas de personas pierden la vida todos los años en Indonesia en naufragios causados por el mal tiempo, infraestructuras precarias o el incumplimiento de la normativa de seguridad, como la sobrecarga de pasajeros y mercancías.
El barco es el principal medio de transporte en el archipiélago indonesio, formado por más de 17.000 islas y con una población de unos 260 millones de habitantes.
El mayor desastre marítimo ocurrido en tiempos de paz tuvo lugar el 20 de diciembre de 1987 en Filipinas y se cobró 4.341 vidas humanas.
El siniestro sucedió cuando el transbordador MV Doña Paz, que iba sobrecargado de pasajeros, chocó contra el petrolero MT Vector y ambos barcos ardieron en medio del mar: solo hubo 24 supervivientes.