El nuevo consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, el almeriense Rodrigo Sánchez Haro, se estrenó ayer en su primera visita a Jaén para participar en el Consejo Provincial del Aceite de Oliva. Y en este foro, que reúne a todo el sector olivarero de la provincia, Sánchez admitió que la coyuntura para la negociación de la futura Política Agraria Común (PAC), más allá de 2020, “se plantea difícil”. Eso sí, el consejero quiso dejar claro que el Gobierno andaluz será “un aliado estratégico del sector del aceite de oliva” ante la negociación de la nueva PAC, al tratarse, dijo, de una cuestión “fundamental para Andalucía y, especialmente, para Jaén”.
Rodrigo Sánchez señaló que la Junta va a apostar por defender una política “que favorezca a las personas que viven del campo, en el campo y que dan vida al campo”, recalcando que “el olivar es un sector prioritario y ocupará una parte importante de esta negociación”. Y añadió que el Gobierno andaluz estará “muy pendiente” de los resultados de la consulta pública que abrió la Comisión Europea para elaborar sus propuestas de la nueva reglamentación comunitaria, un proceso en el que ha participado la región de forma directa, con una respuesta común elaborada en colaboración con las organizaciones profesionales agrarias -Asaja, COAG y UPA- y Cooperativas Agro-alimentarias. El comisario europeo presentará el próximo 7 de julio sus conclusiones tras haber recibido más de 300.000 aportaciones de diversos territorios de Europa.
Respecto a la postura andaluza ante la negociación, Rodrigo Sánchez hizo hincapié en la importancia de “defender entre todos una PAC fuerte” que se adapte a la diversidad del territorio, que permita recuperar la ficha financiera que tenía la región en el marco anterior y mantener la renta de los agricultores. Además, el consejero dijo que deben tener más peso las cuestiones ambientales, un ámbito en el que “el olivar tiene mucho que decir” por su papel como sumidero de carbono y su contribución a la lucha contra la erosión y el mantenimiento de la biodiversidad. También apostó por primar los cultivos con desventajas justificadas como el olivar en pendiente, con especial atención a las explotaciones de pequeño tamaño, que son mayoritarias en el olivar. La apuesta por el relevo generacional y la innovación y el equilibrio de la cadena alimentaria son otros ejes de la propuesta andaluza en la PAC.
El titular de Agricultura recordó que la Junta ha convocado ya subvenciones para este sector cuyo presupuesto global supera los 200 millones de euros y que incluyen ayudas agroambientales y al olivar ecológico (más de 150 millones de euros para los próximos cinco años) e incentivos que respaldan actuaciones promocionales (282.000 euros para nueve Consejos Reguladores de D.O.
