El Obispo de la Diócesis de Asidonia-Jerez, D. José Mazuelos, ha hecho público un Decreto, con fecha del 22 de septiembre, por el que se controla de manera más insistente la creación de nuevas Agrupaciones Parroquiales que tengan el objetivo dar culto externo a una imagen.
Esto se debe “al alto número de hermandades y cofradías de la Diócesis, alguna de las cuales carecen del número necesario de hermanos para cumplir adecuadamente sus fines espirituales”.
A esto se suma una preocupación por parte de Monseñor Mazuelos por la gran cantidad de agrupaciones y grupos que están proliferando con el objetivo de convertirse, algún día, en hermandades de penitencia dentro de las parroquia e iglesias de la Diócesis.
En este nuevo decreto se refleja que “ningún párroco podrá acoger en su parroquia o iglesia a ninguna asociación o grupo joven que quiera dar culto público a una imagen, salvo que obtengan un permiso expreso del ordinario del lugar”.
Que en las Agrupaciones Parroquiales “el responsable último de la economía es el párroco”.
En cuanto a las Agrupaciones Parroquiales ya existentes les hace saber que “Su fin no siempre tiene que ser crear una hermandad de penitencia, ni buscar dar culto público fuera del templo a una imagen, sino que su fin podrá ser servir a la iglesia continuando como Agrupación y viviendo su fe como grupo insertado en la Parroquia”.
Si nos detenemos a en la situación actual que vivimos en El Puerto son dos Agrupaciones Parroquiales las que se encontraban a las puertas de ser eregidas nuevas hermandades para la ciudad como son el caso del Soberano Poder y San Sebastián, nombrada en 2011, de la Parroquia de Valle Alto y la del Prendimiento, desde 2015, con sede en el colegio de La Salle pero perteneciente a la Parroquia de San Joaquín y que ante este nuevo Decreto no sabemos lo que les deparará el futuro.
