Apenas una docena de vecinos de Arcos se echaron a la calle para clamar paz ante los momentos de tensión que viven las relaciones entre España y Cataluña. Vestidos de riguroso blanco, se concentraron junto al Ayuntamiento de la ciudad. Así, se sumaron a la campaña del ‘Parlem’, en alusión al diálogo entre las dos partes como instrumento para devolver la normalidad y el sosiego a la vida de los catalanes y resto de españoles.
Los manifestantes acusaron al Gobierno de la nación de movilizar a la sociedad española “solo con banderas y sin ninguna razón”, así como de alimentar el odio cuando habla de “choque de trenes”. “El odio no nos conducirá a ningún sitio”, explicaba la vecina Arantxa Azcúnaga en nombre de las personas concentradas bajo el lema de ‘Parlem’, que portaron esta leyenda o bien un folio simplemente en blanco.
A renglón seguido, se produjo otra pequeña manifestación en el mismo lugar, pero en esta ocasión luciendo banderas de España en defensa de la unidad del país. Este gesto, secundado por una veintena de vecinos de Arcos también a título particular, se sumó a los cientos de actos registrados el sábado y que encontraron su cita más simbólica en la manifestación celebrada en Barcelona con la participación de cientos de miles de personas.