Aguilar destacó que la prioridad en estos momentos pasa por llevar a cabo las obras de remodelación de la fachada, proyecto del que está al frente.
Por ello, el arquitecto abundó en que “creo que ahora mismo no es importante saber quién es el culpable. En estos momentos hay que tratar de resolver la anomalía para causar el menor dolor de cabeza posible a los afectados”.
Además, Aguilar indicó que “la responsabilidad por esta anomalía tendrá que dirimirse en el juzgado. Cuando se da un caso patológico es mucho más complejo al intervenir otros agentes. Deberá tratarse en profundidad”.
Ayuntamiento y vecinos
A pesar de que fuentes de la compañía Isolux Corsan confirmaron su intención de comenzar las obras de reforma durante el presente mes de agosto, el Ayuntamiento desconoce todavía los plazos de este proyecto.
El concejal delegado de Vías y Obras, Gabriel Orihuela, erigido portavoz consistorial en este asunto debido a la ausencia de Diego Sánchez Rull, señaló ayer que “el Ayuntamiento no tiene confirmación oficial” de la existencia de los plazos del proyecto de remodelación del edificio.
Según Orihuela, se trata de un asunto “lo suficientemente serio” como para “no pronunciarse más allá” hasta que se dispongan de más datos sobre los plazos y el proyecto de reforma final.
En cualquier caso, fuentes municipales confirmaron que, llegado el caso, “previsiblemente se aligeraran los trámites” de permisos y licencias necesarios para acelerar cuanto antes la obra, con el objetivo de que la avenida Blas Infante permanezca cortada el menor tiempo posible.
Mientras, el abogado de la comunidad de propietarios, Antonio Viñas, confirmó ayer que continúan “a la espera de la firma del documento en el que se reconozca la responsabilidad de la dirección técnica y de la constructora para dar el visto bueno al inicio de las obras”.
El objetivo de los vecinos es contar con una respaldo que les descargue de cualquier tipo de reclamación económica futura. En este sentido, la constructora Corsan se mostró tajante días atrás al afirmar que la reparación se realizará “sin coste para los propietarios de las viviendas, que por su puesto no son responsables. Ésta es una cuestión obvia”.