“Los gaditanos no se merecen ni mentiras ni falsas promesas. Quiero recuperar la dignidad perdida. Ese es el fin”. Con estas palabras se puede resumir la primera declaración pública del candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Cádiz, Juan José Ortiz, que era designado por unanimidad por el comité local. Ahora, la propuesta se eleva al comité nacional que mañana mismo se posicionará al respecto.
"Los gaditanos no se merecen ni mentiras ni falsas promesas. Quiero recuperar la dignidad perdida".Tal y como adelantara Viva Cádiz hace varios días, el que ha sido concejal durante tres legislaturas con Teófila Martínez ganaba enteros en la terna planteada por los populares. “Aquí solo hay una familia del PP unida por el interés de la ciudad de Cádiz”. Ortiz manifestó que no va a descansar “hasta devolver la confianza que han depositado mis compañeros en mi”. Trabajo y mucha ilusión son dos de las palabras que utilizó el candidato popular, que quiere que aquellos que confiaron en Teófila confíen en él.
Ortiz cuenta con la experiencia de estos años de gestión. Sabe lo que es poner a Cádiz en el candelero, con una presencia en Iberoamérica, “sé lo que es buscar soluciones habitacionales y lo que cuesta encontrar dinero para solucionar los problemas de vivienda”. Pidió que se dé un paso hacia delante, “que vuelvan a mirar al partido como un motor de transformación de la ciudad”. Recordó la gestión eficaz de la ciudad y afirmó que dará la espalda a la “desidia, el sectarismo y la dejadez ante lo que interesa a los gaditanos”.
Ortiz se ha propuesto “recuperar la confianza de los gaditanos”, trabajando en equipo y demostrando que hay un proyecto de ciudad. “Nunca nos vamos a rendir, jamás. Tenemos futuro y estaremos a disposición de los gaditanos”.
Por su parte el presidente del PP en Cádiz, Antonio Sanz, ya lo proclamaba como “alcalde de la ciudad”, destacó su liderazgo y su conocimiento de Cádiz, así como que es una “garantía de victoria”. La presidenta local, Mercedes Colombo, afirmó que “es el mejor líder de este grupo de hombres y mujeres, con más ganas de trabajar que va a poner a Cádiz en el número uno que es donde tiene que estar”.
Por su parte, su antecesora, Teófila Martínez, declaró que se partiría el alma por cada uno de los integrantes de su grupo que “son grandes trabajadores, porque al PP nunca nos han regalado nada”. Calificó a Juan José Ortiz como “coherente, gaditano de ley y que incluso se emociona como yo”.
Repasó la gestión de Ortiz durante los años que gobernaron la ciudad y “tengo seguro que nunca ningún tribunal va a echar para atrás un presupuesto que él plantee. Sabrá cuándo tiene que expropiar un terreno o poner una demanda para reivindicar algún interés para la ciudad”.
Martínez concluyó que “somos gente que no nos resignamos y además Juan José Ortiz es buena persona y sabe trabajar en equipo”.
Ahora, a Ortiz le queda mucho trabajo de calle, le queda el puerta a puerta del que tanto hablaba Teófila, aunque ganas no le faltan.
El candidato
Quienes conocen a Juan José Ortiz saben que es una persona a la que rara vez le falla la sonrisa en la cara. Con aspecto muy técnico, y con su imagen de joven pero maduro, Ortiz lleva años haciendo gala de su vertiente política, de la mano de Teófila Martínez, quien lo incluyó en su equipo de Gobierno durante sus tres últimas legislaturas.
También es conocida en la ciudad su imagen como profesional de la abogacía, con su propio despacho, que ha venido desarrollando a la vez que su labor política tanto en el Gobierno local como en la oposición. Ortiz ha desempeñado labores muy importantes al frente de la gestión municipal en las últimas legislaturas: como concejal de Vivienda es destacable su papel en programas como el alquiler de viviendas para jóvenes con opción a compra o el desarrollo de promociones en el Casco Histórico, Puntales, y por último en el antiguo solar de la Guardia Civil.
Quizá cuando más pudo lucirse, pero siempre detrás de la sombra de la alcaldesa fue con la celebración de la Conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812, con un programa cultural, a través de la Casa de Iberoamérica, que no tiene ni precedentes ni ha vuelto a repetirse, colocando a la ciudad en la primera línea a nivel nacional e iberoamericano.
Aunque siempre ha preferido no estar en primera línea de batalla política, su saber estar y sus buenas maneras le sirvieron para conseguir resultados satisfactorios durante su gestión, especialmente en materia de relaciones con Iberoamérica.
Puede considerarse como uno de los concejales ligados a la rama ‘amable’ de los anteriores equipos de Gobierno. Jamás puso una mala cara, ni un mohín, ni tuvo ninguna manifestación que resultase malsonante. En él, incluso a la hora de hacer declaraciones, ha prevalecido la sonrisa. Ahora deberá demostrar que es capaz de llegar al gaditano.
