Alrededor de 2.000 personas han disfrutado este jueves de la Misa de Requiem de Giuseppe Verdi, celebrada en la Catedral de Jaén y organizada por la Universidad con motivo de su 25º aniversario fundacional, con la colaboración del Cabildo Catedralicio.
El Requiem de Giuseppe Verdi fue interpretado por la Orquesta y el Coro de la Universidad jienense, el Coro de Ópera de Granada, músicos profesionales contratados para la ocasión y los solistas Carmen Solís, (soprano), Mirouslava Yordanova (mezzosoprano), Francisco Crespo (bajo) y Francisco Corujo (tenor), en sustitución del tenor Sergio Escobar, excusado por motivos de salud. El concierto reunió alrededor de 150 músicos, bajo la dirección Ignacio Ábalos.
El Santísimo Cristo de la Buena Muerte presidió el Altar. La partitura es obra de grandes contrastes sonoros, con pasajes llenos de fuerza, otros de ternura, de melancolía o de piedad. La pieza pasó de un comienzo de gran sobriedad, en el que se mostró el dolor causado por el fallecimiento de un ser querido, al despliegue de teatralidad, gran dramatismo e intensidad arrolladora del ‘Dies Irae’. En el último número, ‘Liberae me’, destacaron los fuertes contrastes. Sin duda, un concierto espectacular. viva jaén
