El Ministerio de Defensa prevé gastar este año 1.114 millones de euros en las misiones en el exterior, 38 millones más que en 2017, un aumento que obedece principalmente a dirigir el mando en Mali y acoger en Rota (Cádiz) el cuartel general de la operación Atalanta de lucha contra la piratería en el Índico.
Un total de 3.079 militares y guardias civiles se encuentran desplegados actualmente en misiones en el exterior, de los que 1.037 están destinados a operaciones de la OTAN, 846 a la UE, 614 a Naciones Unidas, 473 a la Coalición Internacional contra el Daesh, 104 a operaciones con Francia y 5 a misiones de iniciativa española.
Según el Ministerio de Defensa, el pasado año las misiones costaron 1.076 millones y para este año se prevé que se alcancen los 1.114 millones, lo que supone un aumento del 3,48 por ciento.
Su financiación saldrá del Fondo de Contingencia, como viene siendo habitual en los últimos años, y de otros 300 millones de euros que figuran en el apartado de Operaciones de Mantenimiento de Paz incluidas en el Presupuesto de Defensa por primera vez.
El departamento de María Dolores de Cospedal atribuye el ligero aumento a los mayores costes que conlleva ejercer el mando este año de la misión europea en Mali EUTM-Mali, donde se ha duplicado la presencia hasta 300 efectivos, así como el hecho de acoger en la base naval de Rota el Cuartel General de la operación Atalanta.
España ha solicitado a la UE acoger ese Cuartel General que actualmente se encuentra en Northwood (Reino Unido) y que previsiblemente cambiará su ubicación por el "brexit".
Ahora se está a la espera de que la UE decida, ya que la candidatura española compite con Francia e Italia.
Del total de efectivos actualmente desplegados en el exterior 1.760 pertenecen al Ejército de Tierra, 1.034 a la Armada, 196 al Ejército del Aire, 53 a los Cuerpos Comunes y 36 a la Guardia Civil.
Con 607 efectivos la misión en El Líbano es la más numerosa, seguida de Irak, integrada en la Coalición Internacional contra el Dáesh, con 473 efectivos.
A continuación figura Letonia, donde están desplegados 336 militares en una operación de la OTAN para reforzar el este de Europa dentro de una política de contención de Rusia.
El Gobierno autorizó a finales del pasado año la participación de las Fuerzas Armadas hasta el 31 de diciembre de 2018.
En Afganistán autorizó mantener la participación en la misión "Resolute Support", con un ligero incremento de los efectivos desplegados en Kabul, en su aeropuerto internacional y en el cuartel general de la Operación.
En total, habrá 95 efectivos frente a los 30 actuales.
Con respecto a la participación española en la "Coalición Internacional contra el Dáesh", en Irak, España mantendrá su compromiso y potenciará su liderazgo de la base de Besmayah.
Para ello reestructurará y reforzará ligeramente su contribución, ampliándola en unos 30 efectivos, hasta los 480 totales.
En Líbano, España ha ofrecido un candidato al mando de esa misión de la ONU. De ser aceptado, se incrementarían durante el periodo 2018-2020 los efectivos actuales, hasta los 750.
En la República Centroafricana, con veinticinco efectivos, España disminuirá su participación, mientras que se mantendrán los efectivos en las misiones en el resto de África.
La operación "EUNAVFOR MED Sophia" de la UE contra la inmigración ilegal mantendrá los 250 efectivos, con un buque de la Armada y un avión de vigilancia o patrulla marítima del Ejército del Aire.
El Gobierno decidió asimismo mantener desplegada una batería "Patriot" en Turquía.
Asimismo, España enviará en mayo un destacamento aéreo al Báltico en la Operación OTAN de Policía Aérea.
Igualmente, en el marco de Naciones Unidas, seguirá este año aportando observadores al proceso de paz de Colombia.