El ministro de Cultura y Deporte, José Guirao, ha manifestado su deseo de que los restos de Francisco Franco salgan "cuanto antes" del Valle de los Caídos y ha sugerido que a este enclave se le puede dar un papel como el que han adquirido los campos de concentración nazis, que se han mantenido "para que la gente no olvide el horror o no olvide determinadas cosas".
"Por supuesto que estoy de acuerdo con que los restos salgan de ahí, lo que no sé es por qué llegaron allí. Por lo tanto, que salgan, cuanto antes, pues mejor --ha dicho en una entrevista con Europa Press-. De acuerdo con la ley, haciéndolo todo de manera pulcra, administrativa y legalmente. Supercorrecto, como no puede ser de otra manera, pero que salga cuanto antes".
Guirao ha avanzado que el Consejo de Ministros aprobará previsiblemente este viernes 24 de agosto la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos mediante un decreto ley que modifica la Ley de Memoria Histórica. No obstante, ha matizado que el orden del día del Consejo se cerrará este miércoles por la tarde.
Para el ministro, el Valle de los Caídos no es patrimonio cultural porque, a su juicio, patrimonio es lo que toda la sociedad en su conjunto asume que hay que preservar para las generaciones futuras. Así, entiende que, como "monumento de exaltación al franquismo", no es de todos los españoles sino el patrimonio de algunos.
"Pero si asumimos que ya existe este lugar y asumimos, como ha ocurrido con los campos de concentración nazis, que se han mantenido para que la gente no olvide el horror o no olvide determinadas cosas, desde ese punto de vista, entiendo que sí puede ser un lugar donde se intente dar otra visión de lo que fue el final de la Guerra Civil y la posguerra", ha señalado.
ACTOS CONTRA EL PATRIMONIO Y NUEVOS PATRIMONIOS
Por otro lado, en relación las intervenciones erróneas sobre el patrimonio o actos vandálicos, como la pintada de una escultura del siglo XII de la fachada románica de Praterías de la Catedral de Santiago de Compostela registrada este mismo mes, el ministro admite su preocupación porque a veces estos hechos son "irreversibles y degradan el patrimonio", pero no cree que hay que cambiar la normativa para atajarlos. "La ley lo contempla bien, es un problema de práctica, no es un problema de ley", asegura.
En cambio, sí considera necesario recoger en la legislación lo que llama los "patrimonios contemporáneos" que no aparecen en la ley de 1985, en relación al patrimonio fotográfico, audiovisual o digital. En este sentido, aboga por revisar una norma que determina que un bien, cuando es taxativo, debe tener el menos cien años, aunque defiende que el 95 por ciento de la norma del 85 está "plenamente vigente" y responde a las necesidades de patrimonio.
También apuesta por "poner al día" el concepto de paisaje cultural y patrimonio inmaterial. "Las políticas de patrimonio, yo personalmente creo que cuanto mayor consenso haya, mejor --añade--. Vamos a buscar ese consenso con todos los grupos".