Un simple aviso y allí estarían ellos para dejar limpia la playa de San Pedro Alcántara. Una quincena de voluntarios de Acción Vecinal San Pedro Alcántara acudió el pasado sábado a la llamada de la campaña lo cal ‘I like my beaches clean’, de la iniciativa internacional ‘World Cleanup Day’.
“Pensábamos que íbamos a encontrar cuatro colillas porque la imagen que se tiene de las playas de San Pedro es muy buena, pero no fue así. Cuando encontramos esa marea de toallitas no nos lo creíamos”, cuenta Manuel Fernández Valdivia, empresario sampedreño y miembro de este grupo vecinal de voluntarios.
“Estuvimos hablando con extranjeros y se me puso la cara colorada. Se solidarizaron con nosotros y nos comentaron lo decepcionados que estaban y eso que vivimos del turismo”, explica Fernández Valdivia.
Error en el saneamiento
La raíz de este problema viene de largo. En San Pedro Alcántara, Nueva Andalucía y Marbella, las aguas pluviales y feclaes no están separadas, se mezclan y van a parar al mar con la consiguiente suciedad de las playas, un litoral que visitan cada año miles de turistas.
“El problema es que en estas zonas, el Plan General de Ordenación Urbana que ha estado vigente desde 1979 es el aprobado en 1968, ya que el de 1986 se ha hecho efectivo ahora. Este plan imaginaba una Marbella cuyo crecimiento se iba a centrar en el casco urbano, pero puso escaso énfasis en la zona de Nueva Andalucía, incluso ya sabiendo que había planes de construir Puerto Banús. El más perjudicado de todo esto, sin embargo, es San Pedro. que lo tratan como un barrio marginal, que no iba a crecer y que iba a estar reservado a actividades agrícolas. No pensaron en ese momento que San Pedro iba a tener ese crecimiento turístico que ha tenido. Con esto quiero decir que los políticos del franquismo no hicieron un plan de desarrollo para San Pedro”, explica con detalle el empresario.
Como bien es sabido, desde el 68 en adelante, estas tres zonas han ido creciendo sin parar. “Aún hoy existe una falta enorme de infraestructuras. Los desagües en los edificios están mezclados y todo va a parar al mar”, cuenta Fernández.
Soluciones
Ante la problemática, la solución pasa por instalar depuradoras. “Incluso se ha planteado la posibilidad de poner una tubería por el yacimiento arqueológico, pero la Junta no lo permite. Tampoco se están haciendo las obras necesarias para que esto no vierta directamente al mar”, concluye.
Esta acción en las playas ha tomado a los voluntarios de sorpresa, pero aseguran que volverán “mejor equipados” cuando llegue el temporal.
