Ya hay nueva fecha para que los vecinos del centro histórico se echen a la calle para denunciar el abandono de este enclave y exigir un plan de repoblación. Tras verse obligados a aplazarla el pasado 22 de noviembre por no tener garantizado el acompañamiento de la Policía Local debido al dispositivo desplegado con carácter urgente por un aparatoso derrumbe de un antiguo concesionario en Ronda Muleros poco antes de la convocatoria, el colectivo ha vuelto a aprobar una fecha. Será el próximo 21 de febrero y esta vez no se suspenderá salvo caso de fuerza mayor.
“Aunque llueve o truene, nos da igual, vamos a hacerla, que es lo que teníamos previsto hacer con la otra, pero la falta de seguridad al no tener todas las garantías a la hora de velar por la seguridad y los cortes de tráfico nos obligó a posponerla. No lo hicimos por el mal tiempo ni porque quisimos”, precisa el presidente de la asociación vecinal, Alejandro González, contestando así a las manifestaciones que realizó el delegado de Seguridad, Francisco Camas, cuestionando las razones de la desconvocatoria.
Si bien ese día su reivindicación se quedó en una concentración simbólica en la Plaza Belén, el punto de partida, de unos minutos con las personas que se movilizaron para la protesta, pues ni siquiera dio tiempo casi a avisar, en la asociación confían en que la respuesta de los ciudadanos sea masiva. Con la del día 21 de febrero serán ya tres las manifestaciones promovidas para “salvar” el centro histórico y remover conciencias sobre el estado ruinoso del Jerez Intramuros pese a la riqueza patrimonial e histórica que le caracteriza.
En el seno del colectivo vecinal lo tienen claro, su reivindicación es “justa” y el sentido de esta movilización “está más vivo que nunca” para hacer ver a las administraciones en pleno año electoral la urgencia de apostar por un plan de repoblación serio que devuelva la vida a este entorno de Jerez.
