Pitingo y los Hijos de Camarón han sido los encargados en la noche de este martes de homenajear a la figura de José Monje Cruz, Camarón de La Isla, en el 27 aniversario de su fallecimiento. Un evento musical organizado por el Ayuntamiento isleño y que ha sido un éxito rotundo de público, que abarrotó todo el entorno de la céntrica Plaza de La Iglesia, amén de copar las 300 sillas que se habían colocado a tal efecto.
Los primeros en saltar al escenario, al filo de las diez y media de la noche, han sido los hijos de Camarón, es decir, Luis, Gema y Rocío, que durante una hora han rendido tributo a su padre con algunos de sus temas más famosos, comenzando con La Leyenda del Tiempo y sin tampoco dejar pasar la ocasión para versionar el ¡Ay José’ de Raimundo Amador. Se despidieron con el Volando Voy con el que lograron conectar y actuar con el público asistente.
Pasadas las doce de la noche ha sido el turno para Antonio Manuel Álvarez Vélez, conocido artísticamente como Pitingo, y que se declaró fan incondicional de Camarón, al que definió como número uno del flamenco de todos los tiempos. De ahí que fue un concierto especial, en la tierra que vio nacer a José Monje, con la responsabilidad que ello conllevó para al ayamontino.
Pitingo interpretó temas de su último trabajo Mestizo y fronterizo, un recopilatorio de temas que aúnan su carácter mestizo y su tierra, Ayamonte, localidad fronteriza entre España y Portugal. El cantante dispuso sobre el escenario de la Plaza de La Iglesia un espectáculo enorme con un coro de voces gitanos y no gitanos, cubanos y latinos para hacer las delicias de los asitentes.