El tiempo en: Huelva
Jueves 18/04/2024  

Plaza del Pósito

Vacaciones

En la Plaza del Pósito nos vamos de vacaciones, y lo hacemos decepcionados, con rabia y desilusión por la investidura fallida...

Publicado: 30/07/2019 ·
13:49
· Actualizado: 30/07/2019 · 13:50
Publicidad Ai Publicidad Ai
Autor

Santiago Donaire

Santiago Donaire es un histórico militante socialista de la provincia de Jaén comprometido con su tierra

Plaza del Pósito

La actualidad política y social narrada en este espacio desde la experiencia de un librepensador

VISITAR BLOG

En la Plaza del Pósito nos vamos de vacaciones, y lo hacemos decepcionados, con rabia y desilusión por la investidura fallida. Otra vez la desconfianza mutua de la izquierda, el ancestral recelo, la larga mano que desde la guerra civil busca un relato para justificar distancias, y que nada hizo por la unidad que les pedimos a voces desde la calle. Va a ser difícil de olvidar, nos hartaron.

En Jaén las vacaciones del verano siempre se asociaron con la búsqueda del lugar más fresco, hoy aún las llamadas de los amigos desde fuera siempre llevan una aclaración sobre la temperatura: “todas las noches dormimos tapados”, mientras el interlocutor que se quedó, les interpela: “nena, pues nosotros vamos a reventar de calor”. Aquí los veranos son duros, quien puede se escapa unos días, cada uno según sus posibilidades, la ciudad se vacía. Me da que en nuestra niñez, eran más llevaderos, Jaén se despoblaba menos, estaba más viva, las calles con gente, los cines de verano, tertulias por doquier y ventanas abiertas de ruidos indiscretos.

Las vacaciones eran para descansar. Daba igual donde: en casa, en los campos de los puentes cercanos, con la familia del pueblo o en el apartamento de la playa para los más acomodados. La libertad de movimientos y de horarios sin duda lo más grande de aquellos veranos de calles, caminos y ríos. Los cruceros y los agotadores viajes exóticos solo existían en las manoseadas revistas. Nos contentábamos con la piscina de La Victoria y su trampolín.

Me da que las reparadoras y relajantes vacaciones del pasado, las hemos convertido en cortos, caros y agotadores viajes. Una de las preguntas más frecuentes de estos días es: ¿a dónde vas de viaje?, como si viajar fuese una necesidad imperiosa para el verano. Claro que viajar supone o supuso una apertura de mente, conocer diferentes culturas, lugares para desconectar. Pero eso cada vez es más difícil de encontrar, la masificación transformó los destinos turísticos en parques temáticos, vacíos de vecinos y llenos de las mismas franquicias.

Seguro que hay alternativas más enriquecedoras que nos garanticen el cargado de pilas: naturaleza, agroturismo, senderismo, cultura, descanso en la playa, viajar en épocas fuera de temporada…. Cuando hay pequeños en la familia aún es más preciso liberarles de la tiranía del reloj, a la que son sometidos durante todo el año.

No es que estemos de vuelta de nada, pero si hay que anhelar algo no serán los lejanos viajes, sino las tardes en un patín recién regado, la sombra de un emparrado, una partida de dominó, estrellas fugaces, observar la paciencia de las salamanquesas, el crick crick de los grillos, tertulias sobre un poyo con el silencio de unos y la locuacidad de otros, olor a jazmín y albahaca.

Feliz verano       

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN