El Ayuntamiento de Arcos se ha visto obligado, vía urgencia, a actuar en 40 metros de la calle Algar después de que las filtraciones de agua estén afectando gravemente por humedad e inundaciones a varias viviendas. Solo esta obra podría comportar una inversión de 300.000 euros a cargo de la empresa concesionaria de la gestión del ciclo integral del agua en el municipio, Aqualia, en el caso de que se cumplan los peores augurios.
Sin embargo, esta intervención conlleva levantar literalmente una calle que fue pavimentada en el periodo de gobierno del PP-Ai-Pro, de ahí que el actual equipo de Gobierno haya considerado de irresponsable esa actuación porque no se aprovechó para reponer las redes de suministro y saneamiento de aguas residuales.
Además, con la ejecución de la obra se da respuesta favorable a una demanda de los vecinos del lugar, aunque el ejecutivo pide tranquilidad y paciencia ante la finalización de los trabajos, como señala el delegado de Infraestructuras, Diego Carrera.
No obstante, se trata de una estimación porque a medida que se vaya levantando la calle se podría ir dando con los puntos concretos de avería, pero el Gobierno municipal insiste en que se trata de una intervención deslucida e impredecible por ahora.
Con todo, esta obra es solo la punta del iceberg, pues el Gobierno municipal tendrá que actuar en la misma dirección en otros puntos del término donde existen problemas de avería y deterioro de las redes, caso de Camino de las Nieves y sobre todo de las Canteras, zonas rurales y calle Picasso, donde el servicio es claramente deficitario. A ello se le suma la obra pendiente para acabar con las inundaciones en El Santiscal. De hecho, el equipo de Gobierno estima en unos siete millones de euros la inversión para solucionar los problemas de suministro y saneamiento en estas zonas.
El ejecutivo considera que debe ir planificando la conexión del municipio a la red del Consorcio provincial de Aguas, en una actuación cuyo coste podría alcanzar los 20 millones de euros incluyendo las actuaciones citadas anteriormente. La red del Consorcio se encuentra en Jédula y el primer paso podría ser la conexión de zonas rurales como la Junta de los Ríos, aunque se trata de una obra a largo plazo. Por el momento, el Ayuntamiento se ha visto obligado en este sentido a incorporarse como otro miembro al citado organismo provincial.
“Es mucho dinero, pero este equipo de Gobierno trabaja para garantizar el suministro en todo el término municipal porque es nuestra responsabilidad y nuestra obligación para que el futuro de Arcos sea esperanzador en este sentido”. La intención del Ayuntamiento es que tanto las citadas obras como la conexión a la red del Consorcio provincial de Aguas sean una realidad en el plazo de unos siete años si se cumplen las previsiones.
Un reproche
El alcalde de Arcos, Isidoro Gambín, ha reprochado al anterior ejecutivo PP-Ai-Pro que no empleara los siete millones de euros del canon de Aqualia en mejoras en las redes de suministro y abastecimiento, pues utilizó el dinero en otras gestiones.
