El Consejo Local de Izquierda Unida La Línea, empezando por el coordinador de la Asamblea local, Fran Dorado, ha comunicado su dimisión irrevocable tras una reunión telemática mantenida este lunes por la noche. Dicha decisión se toma tras la votación efectuada esa misma mañana en el Pleno de la Junta de Comarca de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, en el que los representantes de IU en esta entidad se abstuvieron respecto a la prórroga de quince años en la concesión del servicio de depuración de aguas de La Línea a Aqualia.
Para la totalidad del Consejo Local de IU, que es el máximo órgano de dirección de la Asamblea Local de La Línea, es “totalmente inadmisible que se apruebe la ampliación, nada menos que en 15 nuevos años, de la concesión de la depuración de aguas de La Línea para una empresa que ha ofrecido y ofrece un pésimo servicio ampliamente denunciado por IU La Línea, así como otros colectivos y personas desde hace muchos años”.
“Nos parece vergonzoso y de dudosa legalidad el hecho que no se haya respetado la duración de la actual concesión y a su finalización, realizar un concurso donde se permita a otras empresas presentarse”, añaden.
“Hay que recordar que este hecho ya ha ocurrido con anterioridad en nuestra ciudad cuando el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía anuló la ampliación del contrato a Aqualia en el año 2009. ¿Volvemos a caer en lo mismo? ¿Ampliamos la concesión deprisa y corriendo en vez de valorar una posible remunicipalización como mantenemos en Izquierda Unida La Línea?”, se preguntan los ya exdirigentes de IU en La Línea.
Pero el hecho que ha motivado su “dimisión irrevocable”, explican, ha sido “la abstención votada por los representantes de Izquierda Unida en la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar”.
En Izquierda Unida La Línea “nos debemos a nuestros votantes, casi un millar, y sobre todo al interés general de nuestro pueblo por el que trabajamos. Es muy difícil de entender para las mujeres y hombres de Izquierda Unida que se vote en contra de los intereses de nuestra ciudad, como ha sido la abstención vergonzante antes mencionada y sobre todo, cuando debía haber sido un voto en contra. Máxime cuando en situaciones similares anteriores en el tiempo nuestros compañeros en Mancomunidad ya habían sido advertidos de la situación de Aqualia en La Línea, habiéndola llevado nosotros incluso a Fiscalía”.
Por lo tanto, y “ante la reiteración de los hechos, no nos ha quedado más remedio que dimitir y trasladar dicha información a nuestros órganos superiores para que actúen en consecuencia”.