El consejero de Presidencia, Administraciones Públicas e Interior, Elías Bendodo, ha anunciado este martes que la Audiencia Nacional ha vuelto a rechazar el pago de una indemnización por parte de las administraciones a la promotora del hotel de Azata del Sol en el paraje de El Algarrobico, en Carboneras (Almería), y ha saludado lo que es "un paso más" para la "demolición" del inmueble.
En rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Bendodo ha valorado el segundo fallo de la Audiencia Nacional en este sentido y ha remarcado que Andalucía "ha iniciado una revolución verde que evidentemente no tiene vuelta atrás" y del que es "bandera" devolver este paraje del parque natural de Cabo de Gata-Níjar "a su estado original".
"La demolición del hotel es un compromiso del presidente de la Junta y será efectivo cuando tengamos todas las garantías jurídicas", ha trasladado para insistir en el que el reciente fallo "es una paso más para llegar a ese objetivo de este gobierno".
Bendodo ha precisado que el pronunciamiento judicial de la Audiencia Nacional se refiere al sector urbanístico sobre el que se levanta el hotel de Azata del Sol "mientras que el primer pronunciamiento se hizo respecto a la edificación".
Cabe recordar que la Audiencia Nacional ya rechazó en febrero que Estado, Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Carboneras (Almería) tuviesen que indemnizar a la empresa promotora del hotel levantado en el paraje de El Algarrobico sobre suelo no urbanizable de especial protección.
La sentencia desestimó la pretensión de Azata del Sol, que demandó a las tres administraciones el pago conjunto y solidario de una indemnización de más de 70 millones de euros para resarcir los "daños y perjuicios" derivados de la situación jurídica del establecimiento de una veintena de plantas y 411 habitaciones, cuya obra fue paralizada por orden judicial en 2005 cuando estaba al 94 por ciento de ejecución.
La cifra incluía un cinco por ciento por daño moral según la tasación realizada por la sociedad Tinsa de acuerdo no solo al valor del suelo y del hotel, sino también teniendo en cuenta el daño moral, material y el descrédito empresarial a la mercantil. La sala consideró en la resolución que no habían quedado acreditado que los daños económicos originados a la empresa sean imputables a la Administración.