De nuevo, el coliseo arcense del Antonio Gallardo será el centro de atención de todas las miradas del mundo del fútbol provincial, al conseguir la Delegación de Deportes por segunda ocasión consecutiva la organización de la final de la fase de ascenso a la División de Honor, que también se celebró en Arcos el año pasado, lo que sirvió para reencontrarse con la competición deportiva en la comarca en unos momentos muy difíciles para la actividad deportiva en la provincia de Cádiz, en los que todo estaba clausurado y suspendido a causa de la Covid-19.
En aquella ‘final a cuatro’ estuvieron Puerto Real CF, Balón de Cádiz, Jerez Industrial CF y Ubrique UD, siendo los blanquiverdes portorrealeños quienes lograron el objetivo del ascenso a la División de Honor al imponerse al segundo filial cadista en la final.
En las filas industrialistas hubo un jugador, el arcense Jesús Barrera, que no pudo contribuir a los deseos de su equipo de promocionar porque sufrió un percance laboral por el que le tuvieron que aplicar puntos en la barbilla. Afortunadamente para él, este año está completamente apto para el gran desafío que le espera, el de derrotar a un Balón que ha dominado a placer tanto en liga como en la mini liguilla de ascenso. Jesús Barrera no puede estar más contento por esta nueva oportunidad que le regala el fútbol. “El año pasado se me quedó una espinita clavada porque, al ser de Arcos, era el que más ganas tenía de jugar en nuestro estadio para ayudar a mi equipo y tratar de ascender en mi casa, pero no pudo ser”, recuerda el pichichi del Industrial y uno de los máximos artilleros de la Primera Andaluza.
Sin embargo, el reciente y sobrecogedor fallecimiento de Pedro Garrido, presidente del club de la copa y la venencia, es otro de los alicientes que espolean a los jugadores del equipo industrialista para luchar a muerte por un ascenso que quieren dedicar a su memoria. “Él más que nadie se merece el ascenso y tenemos que conseguirlo por él. En esta ocasión no nos queda otra que conseguirlo por él y tenemos unas ganas inmensas de hacerlo realidad”, promete el goleador arcense.
La motivación emocional de los industrialistas en general y de Jesús Barrera, en particular, va a ser un factor psicológico muy potente a la hora de acometer el reto de vencer a un gran enemigo como son los balonistas. “Afronto el partido con muchas ganas y vamos a dar el 200 por ciento, sin escatimar en esfuerzo, trabajo y sacrificio y con el deseo de honrar a nuestro presidente Pedro Garrido, con el que nos sentimos en deuda por lo mucho que ha dado por nosotros. Va a ser muy especial para mí y para toda la familia blanquiazul”, reitera el delantero de la histórica entidad jerezana.