Un ejercicio de coherencia. Así ha definido du marcha Miguel Valenzuela esta mañana en la sala de prensa de El Arcángel. El hasta hoy asesor general deportivo del Córdoba CF se ha despedido agradeciendo a González Calvo y Adrián Fernández su apuesta por él y engrandeciendo la labor y la honradez de Juanito, Cámara, Ortega y Herrerías. "Se han ido dando circunstancias que hemos intentado atajar de cualquier manera, reuniéndonos, hablando, todo...pero al final no ha salido porque el fútbol es un hijo de puta de mucho cuidado", ha dicho.
Valenzuela afirma que se va a su casa por voluntad propia, tras firmar 5 años y estar solo 16 meses en el cargo. Anuncia que volverá al Arcángel como socio y reconoce que cometieron errores en la planificación deportiva del primer equipo con la plantilla, entrenadores y refuerzos de invierno. "No me siento víctima de nada, es una decisión que yo tomo. El fracaso es evidente, los fichajes no han funcionado, pero no ha funcionado casi nadie al nivel al que todos esperábamos", ha expuesto.
El ex bético apela al cordobesismo a creer en el proyecto que se ha construido pese a no acompañar los resultados y descender de categoría y ha asegurado que en el Córdoba se acabaron los mangazos y los salarios desorbitados. "Aquí no han llegado los propietarios con un camión de oro. No, han llegado con unos presupuestos ajustados y, por tanto, necesitamos tiempo. Este proyecto necesita tiempo, paciencia y que los cordobesistas tomen conciencia real de que la situación del Córdoba era una situación muy complicada. Y que si de verdad el Córdoba tiene que salir de donde está tiene que ser en manos de gente muy profesionales y muy honestas y son en las manos en las que está ahora", comnentó