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05/05/2024  

Lo que queda del día

Ejemplos de periodismo deportivo

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Hace unos instantes acaba de terminar un hermoso partido de fútbol, el que ha enfrentado a Bélgica y España. Podría haber sido perfecto si TVE hubiese incorporado ese sistema de audio que ya ofrecen algunos canales y que permite presenciar los encuentros con el sonido ambiente, sin los comentarios de los narradores del partido. A cambio hemos aprendido que “la lluvia favorece más a Bélgica que a España”, que aunque queden cinco minutos para acabar un partido “España ya ha logrado su quinta victoria consecutiva” y que después del encuentro viene una serie que no nos podemos perder por nada del mundo. Pues ya me acuesto más tranquilo, más sabio y mejor aconsejado, pero también con cierto ataque de ansiedad por la suma de sandeces que suelen contarse en la narración de un partido de fútbol tan trascendente y, repito, hermoso como el de esta noche. Curiosamente, Canal plus, la cadena que ha enseñado a retransmitir partidos y a captar la esencia de los mismos a través de los detalles que se concitan en el más insospechado rincón de un estadio, la que cuenta con dos comentaristas curtidos y amenos en sus encuentros de cada domingo, ha sido la primera en ofrecernos la opción de quedarnos con el sonido ambiente. Una vez más, da ejemplo quien menos lo necesita.

El caso es que van dos noches seguidas en las que tenemos que padecer los despropósitos de la cadena pública. Ayer, y pese a que estaba anunciado en directo el partido de clasificación para la Eurocopa sub 21 entre España y Suiza -con todo por decidir-, a los de La 2 se les ocurrió que era mejor poner un partido de tenis de Nadal -que debía ser a vida o muerte, por eso de la prioridad-. Cualquier sensato espectador con TDT sabe que TVE suele echar mano de Teledeporte cuando tiene que compaginar dos retransmisiones al mismo tiempo. Sin embargo, en Teledeporte también estaba Nadal, y en la edición digital de RTVE, también. El fútbol, pues, en diferido después del tenis, con España sufriendo para empatar la eliminatoria, marcando en el descuento y provocando la prórroga; o sea, que al que aguantó le dieron las tantas, si es que no sabía ya el resultado. Como suele decirse, la primera… en la frente.

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