El Racing Portuense dio por cerrada una de las semanas más complicadas de los últimos meses con una victoria muy trabajada ante un rival que demostró la posición clasificatoria con la que encaró el derbi de las urgencias. Los racinguistas demostraron desde el minuto uno que para despejar dudas no hay nada mejor que intentar no caer en los mismos errores pasados y aunque los nervios y la presión atenazaron buena parte del choque, los portuenses consiguieron el objetivo de la victoria con la que pendía de un hilo la continuidad del sanluqueño Javier Manzano tras el ultimátum dado el lunes por la directiva rojiblanca. Los primeros minutos del encuentro marcaron lo que daría de sí un choque que se desarrolló con más tensión que juego ante dos equipos que luchaban por huir de la quema en situaciones muy parejas. Por un lado la sorpresa saltó tras la titularidad del juvenil Zafra en detrimento de un puntal como David Villalba, hasta ahora segundo goleador tras Lolo Prado. La osadía o necesidad del técnico local hizo jugar el todo por el todo en un once algo revolucionario. En el banco esperaría la oportunidad otro canterano como Eloy. Finalmente los puntales como Silva, que continúa con problemas en sus rodilla y Mere no fueron de la partida dando aún más mérito al triunfo conseguido dada las bajas con las que contó el equipo de El Puerto.
Y eso que el que empezó atacando fue el equipo de David Galisteo que quiso poner el nerviosismo y la preocupación en los primeros compases del choque tras las llegadas de el ex racinguista Abel, primero y tras el cabeceo de un sanluqueño posterior en los primeros cinco minutos del derbi. El respeto y el miedo a errar hicieron que ambos llevasen la seguridad por encima de las intenciones de abrir claros huecos...
Habría que esperar hasta el minuto 20’ en la que el hombre del partido, el portuense y capitán Lolo Prado para encontrar el primer acercamiento con relativo peligro al área verdiblanca. La falta finalizaría en córner que sería botado por el siete rojiblanco sin demasiado peligro hacia el portal defendido por el portuense y enrolado en las filas sanluqueñas Moi. El juego mientras tanto se desarrollaría sin un claro dominador en el que se hiciera dueño de un juego deslavazado y sin demasiado orden.
Los visitantes sin crear demasiado peligro daban una imagen acorde a la situación clasificatoria de una tabla que continúa estrechándose con el paso de las jornadas.
Y como no podía ser de otra forma habría que esperar a una jugada a balón parado o en jugada personal para desnivelar un marcador que empezaba a inquietar a una grada que esperaba como agua de mayo el triunfo de su equipo. Las cosas del fútbol hizo que el juvenil Zafra en jugada personal tras irse en carrera de su marcador provocase la pena máxima tras cortar en mano unas manos dentro del área. El encargado fue el capitán Lolo Prado que sigue siendo la referencia atacante de un Racing que no ha desperdiciado un penalti esta temporada. El capitán anotaba su cuarto penalti esta temporada y para dejar de lado los malos presentimientos lo hacía en el mismo portal en los que había anotado los anteriores lanzamientos. El partido no podía ponerse mejor para los portuenses que en la primera llegada con cierto peligro se ponían por delante en el marcador. Esto no hizo sino romper un partido que empezó a recordar las urgencias con las que ambos encaraban el derbi. La emoción y las ganas de unos y otros por agradar no hizo sino acrecentar la chispa necesaria para dar con un partido que empezó a subir de nivel. Mientras tanto, Javier Manzano de pie al borde del área durante todo el encuentro mandó a calentar a Toboso.
Abel intentaba dar orden en la medular intercambiando posiciones con el gaditano Carlos Peces. De ahí hasta el final del primer tiempo, los rojiblancos lo intentarían nuevamente por mediación de Lolo Prado que a balón parado llevaría el ¡uy! a la grada tras lanzar una falta que finalizaría en córner.

Entra Toboso

Tras la reanudación David Toboso sustituiría a un voluntarioso pero estéril Villalustre que intentaría dar más mordiente a una delantera que se movía más por intuición que con peligro real. Los patrones continuarían con los mismos derroteros pero una falta dentro del área de Juanma Reyes posibilitaría la igualada de los sanluqueños tras cometer éste penalti. La señalización del sevillano no hizo sino recordar a la parroquia racinguista que los triunfos lejos de ser fáciles hay que trabajarlos y confirmarlos. El ex racinguista Abel Luque sería el que igualara un marcador que hasta entonces resultaría ser un reflejo de los disputado sobre y largo y ancho José del Cuvillo. Dos goles tras sendos penaltis no hacía sino confirmar el respeto con la que ambos conjuntos encararon un choque que hubo más que guardar que ofrecer ante las obligaciones creadas tras los malos resultados cosechados en las últimas jornadas ligueras.
Manzano que por aquel entonces se veía fuera de este proyecto, hizo debutar al canterano Eloy que a pesar de las connotaciones no se mostraría desplazado del juego rojiblanco respondiendo con desparpajo y ganas a una responsabilidad adquiridas a otros de mayor presencia veterana. Y como aquel que se ve fuera y sin mucho que perder realiza el tercer y último cambio de la matinal sacando a un voluntarioso Zafra por Kike. Minutos más tarde Abel Calatayud en jugada personal por la banda derecha llevaría el peso del juego y centraría a un resolutivo Lolo Prado que el área pequeña mandaría el esférico al fondo de la red ante el delirio de una grada que supo interpretar su rol de animar todo cuanto quiso ver. Este triunfo debiera dar la tranquilidad necesaria a un vestuario que quiso zanjar las dudas despertadas con una actitud comprometida.

Javier Manzano: “En lo último que pensaba era en mi futuro”

El técnico del Racing Portuense valoraba positivamente el gran resultado cosechado por los suyos en una semana que a buen seguro habrá sido la más dura deportivamente hablando para el míster rojiblanco. “Lo que estaba en juego era tres puntos necesarios para ambos. Me quedo en que la próxima semana debemos ganar en Los Barrios. Tengo que seguir sufriendo y luchando con este equipo que es lo que me encomendaron al principio. La línea de trabajo debe seguir hasta el final. El equipo lo ha dado todo y ha cumplido con el objetivo que era ganar este partido. Lo importante era los tres puntos. Manzano ha pasado como ha pasado otros entrenadores. El club tiene 82 años de historia. Hay mucho trabajo por hacer”. Para finalizar el sanluqueño aseguró que “el directivo que no se alegre por este triunfo más vale que presente su dimisión”.