Hace años, en mi libro
"Guía Secreta de Sevilla" (2008), hablaba de los
fantasmas en el Castillo de la Inquisición y en el Mercado de Triana, informaciones que se tenían sobre ello y que hicieron que los plasmara en el primer volumen de esta obra. Unos años después una información volvía a hablar de fantasmas en el mercado y de como había habido personas que habían sido testigo de ello. Todo esto provocó, en 2012-13, una visita que finalizó con la autorización a una investigación en el interior del edificio con resultados poco relevantes aunque sí con indicios de cierta actividad que, por calificarla, podría ser tildada de "inexplicable".
Recuerdo que junto con los investigadores
Lorenzo Fernández Bueno y Juan José Revenga estuvimos entrevistando a los responsables de la empresa de seguridad, de -por aquel entonces- Astarté Custodia y que nos dieron todo tipo de facilidades para hablar con personas del mercado y con sus propios empleados de lo que allí sucedía.
Ha pasado el tiempo, ha pasado casi una década y ahora nuevos testimonios vuelven a aflorar sobre fenómenos extraños que suceden en el interior del mismo. Los testigos no autorizan a que se divulgue su identidad pero aceptan que se publiquen sus experiencias.
Hablamos con un empleado de seguridad y con una persona que tiene un "puesto" en el mercado. El primero de ellos indica: "No quiero que pienses que me da miedo estar aquí sólo pero lo cierto es que hay noches y noches. El mercado es un sitio ruidoso pero te vas acostumbrando y sabes diferenciar cual es un sonido "de aquí" y cual no. Hay noches que se escucha, claramente, como llora alguien, es un llanto, no es ningún animal. Buscas pero no encuentras nada. A mí, lo más fuerte que me ha pasado, por lo que me decidí a llamarte, fue dando una ronda, me paré en la zona de la cristalera y sentí como si hubiera alguien detrás, de hecho por el cristal, como si fuera un espejo, pude ver como se acercaba una persona, una niña y se colocaba tras de mí. La vi perfectamente pero al volverme allí no había nadie, se lo que vi y sé que fue real" decía.
Además añadía: "
He escuchado muchas cosas del mercado y soy poco sugestionable, te lo puedo garantizar, pero vi a esa niña. Otra noche, sentí llorar y al dar una vuelta vi, perfectamente, como alguien se escondía tras la esquina de una de las calles, pensé que se había podido colar alguien pues, en ese momento, el mercado estaba en calma, y al ir al mirar, al final de la calle, estaba la niña de nuevo. No es normal, te lo garantizo" finalizaba.
Un
vendedor también me relataba su experiencia: "Yo llevo aquí unos años y desde el primer momento noto que aquí no se está solo. Yo llego temprano para ordenar bien todo lo que hay y, una mañana, muy tempranito, alguien me dio en la espalda, era imposible porque yo estaba dentro del puesto, me volví, y lo raro, por fuera, se alejaba una niña que caminaba para ir a la otra calle. Salí y cuando me asomé había desaparecido. Otra vez al llegar la vi como esconderse entre los puestos. Yo te he leído sobre este tema en varias ocasiones, siempre me lo he tomado un poco a guasa, hasta que me ha tocado y sé que es verdad" concluía.
¿Qué está pasando en el mercado de Triana? La historia del lugar como Castillo de la Inquisición, el sufrimiento, las condenas, el dolor encerrado entre sus muros forma una "película" que, quizás, haya sido la causa para estas nuevas manifestaciones máxime que se registran, en su inicio, desde que abrió el centro de interpretación que se ubica bajo el mismo y que hace que sea una puerta abierta a este tipo de experiencias. Es una hipótesis más, como cualquier otra, pero no la pierdan de vista pues puede contener el necesario germen de la verdad.