Los ayuntamientos tienen competencias directamente relacionadas con la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero, además de planeamiento urbano, transporte, movilidad, gestión energética del municipio, gestión de residuos y sensibilización de diferentes actores.
En el llamado Pacto de los Alcaldes, las entidades locales firmantes se comprometen a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20 por ciento antes del 2020.
La Consejería de Medio Ambiente pone a disposición de los ayuntamientos una herramienta informática para el cálculo de la huella de carbono de los municipios. El concepto de huella de carbono pretende englobar las emisiones directas, como los combustibles fósiles que consumimos en los vehículos, y emisiones indirectas como puedan ser las debidas al consumo eléctrico. Los gases que producen el efecto invernadero son principalmente Dióxido de Carbono CO2, Óxido Nitroso N2O, HFC (Hidrofluorocarbonos), PFC (Perfluorocarbonos) y SF6 Hexafluoruro de azufre.
La herramienta informática sobre huella ecológica pretende expresar en gramos de de CO2, las distintas concentraciones de todos los gases anteriormente citados, para dar un porcentaje de contaminación existente en la población.