El primer gran acto de la programación de las fiestas patronales de San Sebastián tenía lugar este domingo en el Gran Teatro. El pregón es el primer acto civil en honor al patrón, organizado por la Hermandad de Estudiantes y que este año brotó de los labios del periodista Pepelu Bonaño, toda una loa a San Sebastián y una declaración de amor a Huelva, aunque también una reprimenda por las veces que lo “desterró”.
Poesía, música y fandangos. Porque el pregón de Bonaño ha desprendido onubensismo por los cuatro costados. Desde los recuerdos de su infancia, a la semblanza del barrio de San Sebastián, las idas y venidas de la ciudad con su patrón, hasta el resurgir de la devoción: “Amanece tu mañana y vuelves a ser fuente vieja de la que Huelva emana”.
El primero en tomar la palabra fue el hermano mayor de Estudiantes, Pablo Marchena, que recordó la historia del pregón a Sebastián, que se celebró por primera vez el 20 de mayo de 1984, con Rafael Mezquita como pregonero y José María Segovia como presentador. Curiosamente, un año más tarde, ambos invertirían los papeles.
Después, tomó la palabra José Manuel Toscano, que protagonizó una emotiva presentación, poniendo de relieve la gran amistad que le une con el presentador, así como el onubensismo que ambos profesan.
Y llegó el turno del pregonero, que introdujo a los presentes en el pregón al son de un piano, con unas palabras en rima, que fusionaban al patrón con su ciudad: “Sebastián es su nombre y Huelva es su apellido”.
Uno de los momentos más emotivos se vivió cuando Bonaño le habló por fandangos al patrón, desviando después la mirada hacia un palco, donde se interpretaron dos fandangos para San Sebastián.
Pero no olvidó el pregonero los años más negros de las fiestas del patrón, cuando estuvo a punto de perderse: “Huelva olvidó su esencia, pero no hay mal que por bien no venga. Ahora vence la ilusión, brota la devoción”.
Porque Huelva es de su patrón, y por si había alguna duda, así se lo dijo el pregonero a San Sebastián: “Eres centurión de legiones enteras, de legiones choqueras. Capitán, toma el timón y llévanos a puerto”.