La capital onubense ha vivido con intensidad un fin de semana volcado en su patrón, San Sebastián. Ni siquiera la lluvia, presente a diario, ha restado protagonismo a los actos de las fiestas patronales, en los que los onubenses han participado masivamente.
Desde la entrega de las distinciones por parte del Ayuntamiento, a la programación musical, y la procesión del patrón como broche de oro, los onubenses han sido parte activa de unas fiestas que desde hace unos años han recuperado el lustre.
Y a pesar de que la procesión de este domingo, posterior a la función principal, tuvo que acortar su recorrido ante la amenaza de lluvia que a primera hora de la tarde ya hizo acto de presencia, una marea de onubenses acompañaron a San Sebastián en un domingo que quedará para la historia de sus devotos, pues en la recién remodelada plaza de San Pedro, la ciudad elevó la categoría de San Sebastián, que ya no solo es patrón de Huelva, sino también alcalde perpetuo. La entrega del bastón de mando, de manos de la alcaldesa Pilar Miranda, simbolizó este nombramiento.
Y de vuelta a la parroquia de San Sebastián, aunque finalmente no se recorriera el nuevo itinerario de vuelta, el patrón sí que se desvió levemente para tomar el Pasaje del Cristo de la Sangre.
En el apartado lúdico, los conciertos en el parque Alonso Sánchez han sido un éxito de participación, al igual que la jornada sabatina de día en Pablo Rada, donde la lluvia dio una tregua a partir del mediodía y permitió a los onubenses disfrutar de los conciertos y barras en la calle, en una avenida que se quedó pequeña ante la multitud congregada.
El punto y final lo han puesto las tradicionales habas con chocos en la carta del Alonso Sánchez y el concierto de tarde de Macaco.
Huelva despide así unas fiestas patronales a quien ya es también alcalde perpetuo de la ciudad.