FMC Foret y Fertinagro tienen sobre la mesa tres opciones

FMC Foret y Fertinagro han retomado las negociaciones tras reunirse por separado por los sindicatos. Así lo ha afirmado el secretario general Fitag-UGT Huelva, Luciano Gómez, que ha indicado a Viva Huelva que la situación es “esperanzadora” tras esta vuelta al diálogo.

Aunque hace semanas las dos empresa dieron por zanjadas las negociaciones, ahora han vuelto a sentarse en la misma mesa para debatir tres posibles opciones.

La primera es la que se había descartado en un primer momento, esto es, que Fertinagro se quede con las instalaciones de Foret en la avenida Francisco Montenegro de la capital onubense para iniciar una nueva actividad, que supondría la vuelta al trabajo de los 83 recolocables, y que complementaría la actividad que Fertinagro ha planteado en las antiguas instalaciones de Nilefós.

Esta primera opción, en palabras de Gómez, es quizás la más complicada, aunque no se ha descartado del todo, pero el principal escollo, que motivó la ruptura de negociaciones, sigue en el aire: las responsabilidades de cada empresa en materia medioambiental, esto es, la descontaminación del suelo.

Por ello, el ‘Plan B’, como así lo denominaron los propios sindicatos, es la segunda opción que se debate: trasladar parte de la maquinaria de Foret a las instalaciones de la extinta Nilefós y realizar allí parte del trabajo que se pensaba hacer en la factoría de Foret.

El problema de esta opción es que no se podría dar trabajo a todos los recolocables. Sin embargo, para Foret sería una opción muy cómoda, dado que podría desmantelar sus instalaciones, descontaminar los suelos y dar por zanjadas todas sus responsabilidades. No obstante, Gómez indica que desde un punto de vista técnico, esta opción podría presentar complicaciones, ya que el traslado de parte de la maquinaría, que lleva años instalada en la factoría, podría provocar desperfectos e inutilizar algunos de los equipos necesarios.

Por último, la tercera opción, hasta ahora desconocida: que Fertinagro se quede solo con las instalaciones de Foret que necesita para su nuevo proyecto. El resto sería desmantelado y descontaminado. Para Gómez es la opción más factible y recomendable de no prosperar la primera, ya que supondría dar trabajo a gran parte de los 83 recolocables, que Foret diera por finalizadas sus responsabilidades en Huelva y no tener que trasladar la maquinaria.

Mientras, los recolocables esperan una solución acampados a las puertas de Foret, aunque Gómez cree que, para bien o para mal, las negociaciones no se prolongarán por mucho tiempo más.