El Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre (CAD) de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente ha realizado, entre 2001 y 2012, más de 173.000 controles sobre un total de 83.961 muestras, procedentes de 34.815 casos de estudio.
Según destaca la Junta en un comunicado, el centro, que ha contado con un equipo de personas altamente cualificadas como veterinarios, biólogos y analistas, ha consolidado su posición nacional e internacional a través de diversas colaboraciones en proyectos de investigación, cediendo datos y muestras biológicas procedentes de la fauna silvestre de Andalucía. Así, el CAD ha actuado como enlace entre la fauna silvestre y la investigación en Andalucía, España y el resto del mundo.
De esta forma, el laboratorio del CAD, que ha dispuesto de un servicio de urgencias que actúa durante todo el año las 24 horas del día para atender incidentes, ha servido de apoyo a muchos proyectos de la Consejería incluidos en los Planes de Recuperación, Conservación y de Manejo de la Fauna Silvestre y el Programa de Vigilancia Epidemiológica.
Asimismo, como ejemplo de la "eficacia" del centro están los análisis realizados en el laboratorio el pasado mes de julio, que confirmaron la muerte de una veintena de ciervos en un coto de Jerez de la Frontera (Cádiz), tras un aviso recibido a través del dispositivo de Emergencias Sanitarias del Programa de Vigilancia Epidemiológica de la Fauna Silvestre de Andalucía (PVE) de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente.
De esta manera, una vez realizada la necropsia por los técnicos del Programa de Vigilancia Epidemiológica y los correspondientes análisis en el laboratorio del CAD, se ha confirmado que la muerte se produjo por una infección bacteriana (Pasteurella multocida).
La infección detectada se trata de una enfermedad causada por especies del género Pasteurella en animales salvajes y domésticos, una bacteria comensal que reside de manera habitual en el tracto respiratorio de los animales y que, en situaciones de estrés producidos por cambios bruscos de temperatura, falta de alimento o enfermedades debilitantes, puede producir una enfermedad asociada a cuadros respiratorios, habitualmente agudos, como es este caso.
Así, la enfermedad tiene precedentes en el resto de España, como el brote en los Montes Universales (Teruel) en 1991, en Guadalajara y Teruel hace años o en Zamora y León en agosto de 2010. En estos casos, las diferencias de temperatura entre la mañana y la noche pudieron ser determinantes.
De este modo, se trata de un caso típico de la época estival, autolimitada puesto que no se han notificado más muertes, y sin especial gravedad. Por ello, la capacidad de respuesta en detectar los casos y diagnosticar las causas para establecer un posible plan de actuación es muy importante, una cuestión innecesaria en este caso al tratarse de un brote no crítico.
VIGILANCIA EPIDEMIOLÓGICA
La vigilancia epidemiológica de las enfermedades que afectan a la fauna silvestre es un factor determinante debido al papel que tienen muchas de estas especies como reservorios de determinadas enfermedades que afectan al ganado doméstico, en el mantenimiento de diversas zoonosis y en la conservación y gestión de las especies de fauna silvestre, entre otras, las cinegéticas.
Asimismo, para dar respuesta a esa necesidad, en 2009 se puso en marcha el Programa de Vigilancia Epidemiológica como guía de actuación al personal adscrito a la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente para la detección precoz de enfermedades y seguimiento del estado sanitario de la fauna silvestre en su medio natural e indicar los procedimientos de colaboración en los casos en que así se determinen, que se van a seguir con los servicios veterinarios oficiales adscritos a la Junta de Andalucía.