Dichas fuentes indicaron que esta fase de demandas de los acreedores sufrió retrasos en el procedimiento “por la existencia de acreedores en el extranjero e incluso por la falta de medios materiales y humanos” en los juzgados.
De esta forma, una vez que concluyan la resolución de esas 300 demandas, se deberá presentar una propuesta de convenio, algo que pueden hacer tanto deudores como acreedores de la firma multinacional norteamericana.
Las fuentes además agregaron que la jueza del Juzgado de lo Mercantil que lleva el caso, Nuria Orellana, ya autorizó a los administradores concursales a contratar a una empresa especializada como intermediaria para que se encargue de la venta de activos de la fábrica de Puerto Real.
En ese sentido, la empresa holandesa Troostwijk SL, en colaboración con la norteamericana Branford Group, será la encargada de gestionar la venta de toda la maquinaria y los activos de Delphi, después de que la administración concursal firmara con esta empresa la autorización de la subasta, según indicaron fuentes sindicales, que precisaron que todos los activos están valorados por la Justicia en unos 10 millones de euros, y con su subasta se logrará recabar dinero para ir pagando a los acreedores y a los trabajadores.