El ex técnico puede mandar a Tercera a los ranciguistas
Este próximo martes 20 se cumple un año desde que el técnico jerezano Carlos Orúe dimitiese como entrenador racinguista tras caer derrotado en el José del Cuvillo ante el Lucena por 0-2. Un año después, el ex técnico rojiblanco puede ser el que, derrotando al equipo de Fabregat, condene irremediablemente al conjunto portuense a Tercera División.
A pesar de que el entrenador mantiene un litigio con el club racinguista desde que dimitiese como técnico dado que le se adeuda dinero, la relación del jerezano hacia el club de El Puerto ha sido siempre conciliadora. El ahora técnico del Ceuta llegó a afirmar que “primero deben cobrar los jugadores”. Orúe se mostró solidario por la situación de penurias que están atravesando los profesionales racinguistas esta temporada.
En otra prueba más de su saber ser, el mes pasado el equipo juvenil racinguista tuvo que pernoctar debido a la mala climatología del Estrecho y gracias a la amistad del presidente de la Federación de Fútbol con Orúe, los jóvenes canteranos pudieron cenar y hospedarse en un hotel sin mayor problema.
Sin ser portuense ni pregonar su racinguismo a los cuatro vientos ha sabido hacer las cosas con señorío y muy distintas a otros.
En los 26 partidos que Orúe estuvo al frente del Racing consiguió 9 victorias, 8 empates y 9 derrotas. En lo deportivo, el Ceuta no podrá contar para el partido de este domingo ni para lo que resta de Liga con Duque, que se perderá lo que resta de competición, ya que según ha revelado la nueva ecografía que se le realizó, no está recuperado de la rotura fibrilar. Tampoco podrá estar el algecireño Fran Amado y será duda hasta el domingo Txiki.